Si existen en el mundo culturas contrapuestas entre sí son la argentina y la surcoreana, no sólo por los más de 18.000 kilómetros de distancia, si no también por las distinas costumbres de uno y otro. Pero si hay algo que las puede unir a ambas es el fútbol, y el ejemplo de la relación entre Cristian Romero y Son Heun-min se transformó en la devoción de hinchas del país asiático, a tal punto que le cambiaron el apodo a "Cuti".
Romero y Son se conocieron en el Tottenham de Inglaterra cuando el cordobés arribó a comienzos de la temporada 2021, proveniente del Atalanta italiano. Más allá de las buenas prestaciones del exjugador de Belgrano de Córdoba, que obligaron a la dirigencia de los Spurs a hacer uso de la opción de compra de su ficha, el defensor y delantero generaron simpatía desde el inicio y fueron cultivando una amistad que quedó demostrada en algunos partidos y hasta en videos que el club publicó en sus redes sociales.
En uno de esos posteos de la cuenta oficial del Tottenham, se escucha a Romero decirle a Emerson Royal tras observar un video en que golpean al surcoreano: "No lo toques a Son que es mío". En otros tantos videos que se hicieron virales, se ve a Son jugar con el hijo de Romero tras finalizar un encuentro. Esas demostraciones de cariño llegaron hasta los fanáticos de Corea del Sur, donde Son es la máxima estrella, y "shippearon" la relación entre ambos.
El "shippeo" de los surcoreanos a Romero y Son
El término "shippear" es la traducción anglosajona que deriva de la palabra inglesa "relationship", que significa la idealización de una relación sentimental entre dos personas o personajes llevada a adelante por sus fanáticos. Suele tener una intención irónica, que sobredimensiona una situación, ya que no es lo que en realidad sucede. Los surcoreanos, fieles seguidores de los Spurs por su culpa de su ídolo, "shippearon" la tierna relación entre ambos jugadores a un nivel extravagante pero gracioso.
Es que cuando se enteraron del apodo del jugador de la selección argentina, en vez de decirle "Cuti" comenzaron a llamarlo "Cutie", que en inglés tiene la acepción de "lindo", en su versión más tierna. Los innumerables encuentros entre Romero y Son sirvieron para alimentar aún más la visión dulce que tienen del defensor central y, cada vez que tienen la oportunidad, remarcan su comportamiento con respecto a Son.
El jugador surcoreano de 30 años tampoco oculta la especial relación que tiene con el cordobés, lo que aumenta aún más el cariño del fandom coreano por el argentino. "Le escribí a Cuti para preguntarle si estaba bien. Antes del torneo estuvo lesionado. Él es uno de mis mejores amigos", comentó días antes del inicio del Mundial de Qatar 2022. Con Romero y Son con chances de avanzar de ronda en sus respectivos países, ambos podría llegar a enfrentarse en una hipotética semifinal, donde para los surcoreanos Romero ya dejaría de ser "Cutie" y los abrazos entre ambos quedarían para otro momento.