La esperanza de Inter Miami de seguir rodeando a Lionel Messi con estrellas concluyó: Luis Suárez no llegará en el actual mercado de pases al equipo de la Major League Soccer y el sueño de volver a juntarse en una cancha con el rosarino deberá esperar. El entrenador de Gremio aclaró públicamente la decisión y se mostró feliz por la contuinidad del uruguayo.
No era sencillo que volvieran a reencontrarse, pero la ilusión se había puesto en marcha a través de un llamado telefónico hace algunas semanas. Con la llegada de Sergio Busquets y Jordi Alba a Inter Miami, Suárez se envalentonó con la idea de volver a compartir equipo con su amigo y mejor jugador del mundo, pero todo indica que no será en 2023.
La revelación del DT de Gremio sobre Luis Suárez
En los últimos días, la posibilidad de que "Lucho" se marchara al Inter Miami había tomado un camino real luego de las charlas que comenzaron con la dirigencia del Gremio para rescindir el contrato. Incluso, en el último encuentro del equipo Gaúcho en el Brasileirao, Luis no había sido ni siquiera convocado y todo parecía acomodarse para cumplir su deseo. Sin embargo, el sueño se terminó, al menos por ahora.
MInutos después de haber caído 2 a 0 ante Flamengo, por la semifinal de la Copa de Brasil, en la que el "Pistolero" volvió a la titularidad, Renato Portaluppi, entrenador de Gremio, dio por finalizado el posible traspaso de Suárez a Estados Unidos: "Jugador muy importante, marca la diferencia. Estoy hablando de esa telenovela mexicana, pero se acabó. Da tranquilidad tanto a él como al club. Se queda hasta diciembre, nos da esa tranquilidad".
Si bien "Lucho" tiene contrato con el club de Porto Alegre hasta diciembre de 2024, podrá renegociar una salida en diciembre próximo, ya que el contrato que le quede por delante será con una salario no muy abultado y la recisión se daría en otros términos económicos. Para que su salida fuera efectiva en este mercado de pases, el centroatacante debía pagar una suma que rondaría los 10 millones de dólares, por lo que ahora esperará seis meses en Brasil y luego cumplirá su sueño de reencontrarse con Messi tras tres años alejados.
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