Después de que hace un mes se conocieran tuits discriminatorios, clasistas, xenófobos y racistas de varios jugadores de Los Pumas, la Unión Argentina de Rugby lanzó un insólito "castigo" a los rugbiers que publicaron en sus redes sociales distintas expresiones racistas.
El mismo día en el que se conoció que el último sabado un grupo de rugbiers del club La Plata atacó a un chico en una fiesta, la UAR trató de resolver el inconveniente sobre los jugadores del plantel superior Pablo Matera, Guido Petti y Santiago Socino. La Unión Argentina de Rugby decidió que los rugbiers discriminadores tengan que participar en un curso de seis horas que se desarrollará en tres días de 2 horas cada uno con los objetivos de, según revelan en el comunicado, de "tomar conciencia de dónde surgen los prejuicios y de las consecuencias que estos tienen en las relaciones entre las personas" y para "prepararlos para participar dentro del programa de “Estereotipos discriminadores y prejuicios” de Rugby 2030, hacia Una Nueva Cultura".
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En el mismo sentido, también indicaron que tendrán que grabar un video con "con contenido formativo sobre “Estereotipos discriminadores y prejuicios”, que se utilizará como recurso pedagógico de referencia para los jugadores y jugadoras". En ese mismo "castigo" también añadieron que los jugadores tendrán que asistir dos días al espacio Rugby 2030, hacia una nueva cultura para compartir experiencias".
Por otro lado, según explicaron desde la UAR, "la elegibilidad de los tres jugadores queda supeditada al cumplimiento de las medidas restaurativas impuestas y este Consejo Directivo retira el aval a la capitanía de Pablo Matera hasta que las medidas restaurativas sean cumplimentadas satisfactoriamente".
Otro detalle del extenso comunicado es que, más allá de la cuestión racista y xenófoba, nunca hacen referencia a las discriminaciones clasistas o misóginas en las que estuvieron envueltos tantos Pablo Matera, Guido Petti y Santiago Socino.
Otro ataque rugbier
Doble fractura de tabique, cuatro dientes rotos, un corte en la cara y un traumatismo en el ojo: el saldo de la locura. Un estudiante de 23 años fue brutalmente golpeado este fin de semana por dos hermanos que juegan en La Plata Rugby Club tras una fiesta clandestina.
Según la denuncia, Felipe Di Francesco, el joven agredido, juntaba la basura que había quedado en el lugar después del evento y les pidió a los acusados que “colaboraran”. Los hermanos no solo se negaron, sino que lo insultaron en el momento y, unos minutos después, volvieron y de dieron el primer golpe.
El evento sucedió en una playa de Claromecó, un balneario de la provincia de Buenos Aires. “Son rugbiers. Cuando vivían acá (por Tres Arroyos) jugaban en el Club Cazadores y ahora viven en La Plata. Me gustaría que esto llegue allá para que los echen”, sostuvo Guillermo, padre de la víctima.
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