River Plate es un club que ha sabido cosechar éxitos y glorias a lo largo de su historia. Su mural de ídolos está lleno de grandes nombres como Omar Labruna, el Beto Alonso, Ramón Díaz y Marcelo Gallardo. Sin embargo, no todo ha sido color de rosa en el Monumental. A veces, las incorporaciones que llegan con grandes expectativas terminan siendo un fiasco.
Por eso en este artículo vamos a repasar los 8 peores refuerzos de la historia de River, esos jugadores que llegaron para ser figuras pero terminaron siendo un dolor de cabeza para los hinchas.
Los 8 peores refuerzos de la historia de River
Adalberto Román
Adalberto Román llegó a River en 2010 y es recordado por cometer una insólita mano que encaminó la derrota de River en la promoción contra Belgrano. Su pase costó U$S 3.600.000 y su rendimiento fue tan malo que terminó siendo uno de los refuerzos más criticados de la historia del club. A sus 36 años, su último paso por el fútbol profesional fue en el club San Lorenzo de Paraguay, donde dejó la institución en 2020.
Por el costo de su pase, su magro rendimiento y su fatídica noche en Córdoba, para muchos es considerado la peor contratación realizada por la institución de Núñez.
Mario Daniel Vega
Mario Daniel Vega fue transferido a River Plate desde Nueva Chicago en 2007. Durante su tiempo en el club, apenas si jugó un puñado de partidos y terminó siendo una de las peores inversiones del equipo. Su falta de oportunidades y su posterior salida del club lo convierten en uno de los refuerzos más olvidables de la historia de River. Tras su partida del club Millonario, primero tuvo un breve paso por el fútbol de Chipre para terminar recalando en las divisiones inferiores de Estados Unidos, donde se retiró a comienzos del año 2022.
Luciano Vella
Luciano Vella llegó a River en 2011 con la esperanza de aportar experiencia y calidad al equipo. Sin embargo, su rendimiento fue tan bajo que terminó siendo cedido a Unión de Santa Fe en 2013. Su paso por River fue tan intrascendente que muchos hinchas ni siquiera recuerdan su nombre.
Bruno Urribarri
Bruno Urribarri llegó a River en enero de 2014 y jugó solo 7 partidos en dos años. Su rendimiento fue tan pobre que los hinchas se preguntan hasta el día de hoy cómo llegó al club. El lateral izquierdo surgió de las inferiores de Boca Juniors, y llegó al Millonario tras un breve paso por Colón y el Asteras Trípolis de Grecia. Desde 2017 jugó en Patronato de Paraná hasta comienzos del 2022, cuando anunció su retiro oficial del fútbol.
Marcelo Sosa
Marcelo Sosa llegó a River en 2005 con la esperanza de ser el mediocampista defensivo que el equipo necesitaba. Sin embargo, su rendimiento fue muy por debajo de lo esperado. No solo no pudo afianzarse en el once titular, sino que también mostró falencias en la recuperación del balón.
Además, Sosa no logró adaptarse al ritmo del fútbol argentino y su paso por River fue efímero. En menos de un año, el uruguayo fue transferido, dejando una huella negativa en la memoria de los hinchas. Por último, su falta de compromiso y actitud dentro del campo de juego también fueron puntos en contra. Marcelo Sosa es recordado como uno de los peores refuerzos de la historia del club, y su nombre suele aparecer en las listas de decepciones riverplatenses.
Cristian Fabbiani
Cristian Fabbiani llegó a River en febrero de 2009 y su arribo a Núñez generó una gran expectativa, ya que había mostrado un gran nivel en Newell's y tenía todo para convertirse en la gran estrella millonaria. Para añadirle una dimensión adicional, su pase fue complicado y hubo una novela de varias semanas. Sin embargo, al llegar no logró la continuidad ni rendimiento esperados, y su estado físico estaba lejos de ser el ideal.
La llegada de Fabbiani generó tanto revuelo que los hinchas compraron caretas del famoso Ogro de Shrek, pero se fue por la puerta de atrás a All Boys luego de 32 partidos y apenas tres goles.
Jonathan Bottinelli
Jonathan Bottinelli llegó a River con un pase valorado en millones de dólares, pero su rendimiento fue muy por debajo de las expectativas. Además, tuvo problemas legales con la AFIP que afectaron su continuidad en el equipo, sumado a algunas cuestiones internas en el plantel. Su paso por River es considerado como uno de los más desastrosos de la historia.
Josepmir Ballón
Josepmir Ballón llegó a River por pedido del técnico Ángel Cappa, pero su rendimiento fue tan bajo que terminó siendo cedido a otro club. Jugó solo 12 partidos y el volante peruano es recordado por permitir que River utilizara el viejo artículo 225 a favor de Erik Lamela durante varios partidos.