La imperdible reacción de Oscar Ruggeri al revivir Brasil vs Argentina en Italia 90: "Verlos llorando"

Rememorando un partido épico, el “Cabezón” tuvo sus icónicos comentarios de lo que fue una de las tardes más felices de su carrera en la Selección.

23 de marzo, 2022 | 21.38

Los octavos de final de la Copa del Mundo de 1990 quedarán por siempre en la memoria de los argentinos por lo icónico que fue dejar en el camino a Brasil, pero mucho más a fuego quedó grabado en uno de los protagonistas de aquella tarde en Italia como Oscar Ruggeri, quien revivió el encuentro y lanzó distintas chicanas.

En el programa ESPN F90, el “Cabezón” vio un compilado de las jugadas más peligrosas y sufrió cada una de las llegadas de la “Verdeamaerela”, que prácticamente bombardeó el arco nacional, mientras que los avances propios eran prácticamente escasos y sin efectos severos. A pesar de ser la campeona defensora, la Albiceleste sufrió en aquel Mundial y este partido fue la clara demostración de la suerte que necesitaba para poder avanzar a instancias finales. En el ping pong contra los vecinos, fue derrota 10-9 para la Selección, aunque se contabilizaron algunas jugadas que pasaron muy lejos del arco rival.

 

Las reacciones del exdefensor fueron completamente imperdibles y cada acción tenía un comentario que hacía estallar de risa a sus compañeros en el piso: “Allá no caí, lo maté. Mirá como caigo yo con uno”. Así iba afirmando mientras se veía cómo luchaba con Ricardo Rocha en un centro al área. Sin temor de responsabilizar a sus compañeros, el excentral se desligó de un mal control de Sergio Goycochea en el arco: “Pero ahí qué tenemos que ver nosotros”. A su vez, también el arbitraje ligó unas críticas: “No sé si no nos dieron un penal”.

De la cara de pánico a la felicidad, así cambió la cara de Oscar cuando las buenas empezaron a ser nuestras y se acercaba el momento de la verdad: “Lo teníamos planeado así, a base de contragolpes", y agregó: "Igual acá falta una jugada, una de cabeza”.Al instante de narrar el gol, lo gozó como si fuese la primera vez: “Tomá, Armando, metesela a Cani. Gambetealo Cani y salí como un loco. Mirá cómo hace ahora, mirá cómo hace. Viste, chau. Afuera”.

Terminado el partido 1-0 con el tanto del “Pájaro” sobre el final, confesó lo que sintió al saber que habían hecho algo histórico como eliminar al clásico, que era uno de los candidatos al título por el equipo que tenían: “Yo me di la vuelta olímpica ese día. Qué alegría verlos a todos llorando. Y eso que le faltaron jugadas”.