La noruega Solfrid Koanda se proclamó campeona olímpica de halterofilia de 81 kg en los Juegos Olímpicos de París el sábado, al levantar un total de 275 kg y dar a su país su segundo título olímpico en este deporte.
La joven de 25 años se hizo con el oro 52 años después de que su compatriota Leif Goran Jenssen se proclamara campeón olímpico de peso semipesado en los Juegos de Múnich 1972.
Koanda casi pierde la delantera por poco en el snatch después de que la ecuatoriana Neisi Dajomes levantara unos impresionantes 122 kg en su tercer intento para terminar sólo un kilo por encima.
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Sin embargo, Koanda, excampeona mundial de 87 kg, demostró su fuerza con un soberbio levantamiento de 148 kg en su primer intento en la prueba de clean y snatch, que superó por seis kilos en su segundo intento y se aseguró el oro.
La egipcia Sara Ahmed, excampeona del mundo de 76 kg, levantó unos impresionantes 151 kg en su segundo intento de clean and jerk para terminar con un total de 268 kg y hacerse con la plata.
Dajomes se hizo con el bronce con un total de 267 kg tras fallar en su tercer intento en el clean and jerk debido a un desmayo en el escenario, aunque se recuperó rápidamente.
La ecuatoriana, de 26 años, suma su segunda medalla olímpica tras ganar el título de 76kg en Tokio hace tres años e igualó a su hermana Angie Palacios, que también se colgó el bronce el viernes en la categoría de 71kg.
Tras los Juegos de Tokio, la Federación Internacional de Halterofilia (IWF) reorganizó el programa y la categoría femenina de 81kg es una de las nuevas categorías olímpicas para París.
La campeona del mundo Liang Xiaomei, plusmarquista mundial con 284 kg combinados, se quedó fuera del equipo chino.
(Reportaje de Angelica Medina en París; Editado en español por Héctor Espinoza)
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