En 2019, mientras Nicolás González, que se consagró bicampeón de America con la Selección Argentina, jugaba en el Stuttgart, recibió una tentadora oferta de Nicolás Burdisso, ex secretario técnico de Boca Juniors, para regresar al fútbol argentino y unirse al Xeneize. En ese momento, rechazó la invitación por no ser el club de sus amores.
A pesar de rechazar la propuesta de Boca, Burdisso más tarde lo llevó a la Fiorentina, donde González continuó su carrera con éxito. Con solo 25 años, el delantero, formado en Argentinos Juniors, expresó su deseo de jugar algún día en el equipo del cual es hincha.
Su deseo de jugar en River Plate
González manifestó su amor por River Plate, y respondió con claridad: "Si llego a ir a Boca, mi familia no me dejaría entrar a mi casa... Son todos de River, y yo también". En una entrevista con el youtuber Ezzequiel, González manifestó: "Tengo muchas ganas", revolucionando a los hinchas de River con esas palabras. Más allá de su fanatismo personal por el club, hay un motivo especial que lo impulsa: "Quiero que mi hermano me vea con la camiseta de River puesta. Para él sería muy lindo y para mí muy especial".
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Aunque los seguidores del club ya lo ven como una futura incorporación y lo convirtieron en tendencia en redes sociales, González aclaró que por ahora está enfocado en su carrera en Europa. "Hoy en día pienso acá (Fiorentina). En el día de mañana obviamente que me encantaría estar en River, si Dios quiere. Pero todos los de mí alrededor saben que me gustaría estar", explicó el delantero.
Una actualidad llega de éxitos
Nicolás González tuvo un buen desempeño en la Fiorentina, ya que metió siete goles en 12 partidos entre la Serie A y la Conference League en el comienzo del semestre. A pesar de su compromiso con el club italiano, González sigue de cerca a River Plate. "Lo sigo a River partido a partido. Si al otro día me toca entrenar temprano, bueno, iré con cara de dormido", comentó en referencia a su dedicación al equipo argentino.
En la Fiorentina, comparte vestuario con Lucas Martínez Quarta, quien constantemente le habla de River, y Lucas Beltrán, máximo goleador de la era Micho. Mientras tanto, la dirigencia de River Plate ya mandó camisetas personalizadas con su nombre y número a Italia, mimándolo en cada partido que juega con la Selección Argentina en el estadio Monumental.
Nicolás González sueña con el día en que pueda vestir la camiseta de River Plate, un anhelo que comparte con su familia y sus seres queridos. Aunque ese día aún no ha llegado, la ilusión y el deseo están más vivos que nunca.
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