El lateral derecho Dani Alves definió la derrota de la selección brasileña ante Camerún por 1-0 el viernes como una "llamada de atención" para la fase final del Mundial.
Incluso con el revés, Brasil se aseguró el primer puesto del Grupo G y se enfrentará a Corea del Sur en los octavos de final.
"Creo que es una llamada de atención para que seamos conscientes de que aquí no hay ningún rival débil, que todos los rivales en cada partido se juegan algo", dijo el jugador en una entrevista en la televisión tras el partido.
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"Creo que esa es la lección, que tenemos que estar durante todo el partido concentrados", agregó.
Con la clasificación ya asegurada, el técnico Tite alineó un equipo completamente de reserva para el partido, que incluía al propio Dani Alves como lateral derecho, tras la lesión del titular Danilo y el paso de Éder Militao al centro de la defensa.
Con varias ocasiones falladas, Brasil recibió un gol a los 93 minutos cuando el delantero Vincent Aboubakar remató de cabeza un centro enviado desde el sector derecho.
"Ahora no hay margen de error, es bueno que estas cosas sucedan en este momento para alertarnos. Vamos a tener que luchar por los espacios en la cancha, tenemos que aprender la lección de hoy", añadió Alves.
En los octavos de final, Brasil enfrentará el lunes a Corea del Sur, que finalizó segundo del Grupo H tras derrotar más temprano a Portugal por 2-1.
Con información de Reuters