Después de lo que ocurrió el último martes ante Arabia Saudita, rápidamente Lionel Scaloni decidió meter mano en el equipo para enfrentar a México en la segunda fecha de la Copa del Mundo. El entrenador tiene decidido hacer varios cambios y, en principio, se habla de mantener a los jugadores más importantes de su ciclo. A saber, ellos son: Rodrigo De Paul, Lionel Messi, Lautaro Martínez, Nicolás Otamendi y Leandro Paredes. Sin embargo, este último aparece con un signo de interrogación ya que puede haber un cambio de último momento que entregue una mayor contención en la mitad de cancha.
En el Mundial de Italia 1990 luego de la derrota 1-0 ante Camerún en el primer partido, Carlos Salvador Bilardo tomó una fuerte decisión. Después de haber perdido ese primer partido, el "Narigón" decidió modificar ese clásico esquema de 3-5-2 que tantas alegrías le dio en 1986 y a varios referentes de la Selección que, hasta ese momento, llegaban como intcoables. Ingresaron: Pedro Damián Monzón, José Serrizuela, Pedro Troglio, Julio Olarticoechea y Claudio Caniggia. De una, el exentrenador de la Selección movió todo el avispero y entregó un equipo mucho más guerrero a diferencia de lo que había presentado. Más de 30 años después, una historia se vuelve a repetir y también -quizás casualidad- con un entrenador que tiene un pasado -al menos como jugador- por Estudiantes de La Plata. Lionel Scaloni volvió a lanzar un volantazo y, esta vez, realizará varios cambios para el segundo partido. Entre ellos uno de los defensores centrales, los dos laterales y hasta puede haber grandes cambios en mitad de cancha.
Uno de los principales puntos que, por lo que se vio, tiene que reforzar Lionel Scaloni es el mediocampo. Después de haber presentado un equipo largo, partido y -sobre todo- muy ancho en el que los extremos estaban alejados de la mitad de la cancha y de la conexión entre los mediocampistas. De esta forma, tal cual cuenta Camila Gómez Ares en su columna para El Destape, puede haber un cambio para dominar ese medio campo y ganar así las espaldas de los interiores contrarios. Mientras que, por su parte, la búsqueda está en tratar de frenar el ataque y aprovechar los espacios del equipo que tiende a quedar mal parado en defensa, o con poca gente cuando avnaza.
Con respecto a México, la búsqueda será por por mantener la pelota y tratar de lastimar a partir de la posesión. Esa situación, por otro lado, puede llegar a ser contraproducente para el propio México ya que la distribución de la pelota en campo rival puede llegar a dejarlo abierto atrás para una salida rápida de la Selección Argentina. Si, por el contrario, Gerardo Martine decide "tirarse atrás" el equipo mexicano tomará una decisión antinatural para su propio juego que puede ser complicado ya que no tiene la naturalidad para defender: no está en sus genes.
Más allá de esta situación, la Selección Argentina es capaz de levantar una situación con respecto al juego. Sin embargo, se espera una mayor respuesta desde lo anímico a diferencia de lo que ocurrió con Arabia Saudita que, por otro lado, no demostró una gran respuesta luego de los cachetazos. Ahora es necesario volver a tener el mismo espíritu. Ese espíritu que los llevó a la Copa América 2021.
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