Los Pumas no pudieron ante un implacable Sudáfrica y cayeron sin atenuantes por 48 a 7, en un partido que se quebró completamente a partir de la roja a Pablo Matera en el segundo tiempo. El equipo de Felipe Contepomi, que llegaba con chances de quedarse con el título, se quedó con el tercer lugar del Rugby Championship, pero hay varios aspectos positivos de cara al futuro.
En un estadio Mbombela de Nelspruit en estado de ebullición, los bicampeones del mundo impusieron condiciones rápidamente y demostraron que la derrota del pasado fin de semana en Santiago del Estero había quedado en el pasado. Con la ventaja de saber que con un punto bonus se consagraban campeones, los dirigidos por Rassie Erasmus empezaron el partido a puro poderío físico con sus forwards, fiel a su estilo.
A los 7 minutos, los locales abrieron el marcador. Después de una mala salida con el pie de Argentina al line, arremetieron una y otra vez cerca del ingoal, quebraron la defensa la defensa, Aphelele Fassi apoyó abajo de la H y luego Libbok convirtió el 7-0 para los Springbocks.
Lejos de conformarse, Sudáfrica fue por más con un tremendo apoyo que bajaba desde las tribunas. A los 14, tras otra situación avasallante de sus forwards, Pieter-Steph Du Toit saltó entre varios jugadores argentinos, anotó el try y Hendrike convirtió para poner el duelo 14-0.
Cuando parecía que Los Pumas sufrirían toda la primera parte, demostraron una reacción inmediata. A los 19 minutos, después de una muy buena jugada que tuvo offloads, Tomás Albornoz se cortó solo por la defensa y corrió para anotar el try. El propio apertura anotó la conversión para dejar el match 14-7.
Cuando Argentina intentaba acomodarse, un penal a los palos volvió a ampliar la ventaja para los locales. Pero a los 32 minutos, Fassi apoyó para darle el tercer try del partido a Sudáfrica y llevar el partido a 22-7 tras otra gran jugada de los Springboks, con Kolbe asistiendo desde el piso tras superar dos tackles.
Antes de la finalización del primer tiempo, Los Pumas sufrirían la baja de Santiago Chocobares por lesión y la salida momentánea de Juan Martín González, pero también otro try en contra. A los 39, Cheslin Kolbe apoyó un tremendo try sacándose de encima a varios jugadores de Los Pumas y dejando el resultado 27-7 para los locales.
Ya en el segundo tiempo, el match se hizo más trabado, Los Pumas tuvieron chances de descontar el marcador, pero los errores de manejar le imposibilitaron ponerse en partido. Incluso, una roja a Matera a los 62 minutos, que se lanzó en la “limpieza” en un ataque de Los Pumas y terminó golpeando a un rival en la cabeza, casi que terminó por echar por tierra las ilusiones. Como si fuera poco, 6 minutos después Santiago Carreras recibió la amarilla en el intento de impedir un ataque sudafricano y Argentina jugó con 13.
A los 70, el conjunto sudafricano no perdonó la ventaja: el hooker ingresado en el segundo tiempo Malcolm Marx hizo fuerza entre las manos luego de un ruck y apoyó un nuevo try, que luego Handre Pollard convirtió para establecer el 34-7. Minutos después, tras un try anulado, Du Toit volvió a filtrarse entre la defensa, apoyó en el ingoal y Pollard dejó el 41-7, en un partido ya quebrado.
Pero el golpe final de Sudáfrica llegaría a los 77: con un rival totalmente desbordado y disminuido físicamente a esa altura, Jesse Kriel, con algo de fortuna, se quedó con la pelota y es escapó al ingoal para liquidar la historia y quedarse con el Rugby Championship, título que no obtenían desde 2019.
El cierre complicado para un buen Rugby Championship
Más allá del golpe que significa la derrota por la diferencia en el juego y en el marcador, Los Pumas demostraron que tienen con qué para plantarse ante las potencias. Además de las tres victorias frente a Nueva Zelanda, Sudáfrica y Australia, desde el arribo de Contepomi se observaron buenas aptitudes, como el juego desplegado y una mejor disciplina. Además, se amplió la base tanto en la segunda como en la tercera línea con jugadores que le dieron frescura al equipo.
Lo que se viene será un receso del seleccionado de más de un mes, en el que los jugadores volverán a sus equipos y luego tendrán un Camp en Europa, para comenzar la preparación para la ventana de noviembre. Allí, Los Pumas se enfrentarán a Italia, Irlanda y Francia, tres rivales de fuste para confirmar lo hecho en el Rugby Championship.