La UEFA confirmó finalmente este martes que la Supercopa de Europa entre el Bayern Munich de Alemania y el Sevilla de España se jugará con público en lo que marcará el regreso de la gente a los estadios en un evento de semejante envergadura.
Según detalló el organismo en un comunicado, se trata de un "regreso parcial" del público, ya que sólo estará permitido el ingreso del 30 por ciento de la capacidad del estadio Puskas Arena de Budapest, Hungría, donde se llevará a cabo dicha final el próximo jueves 24 de septiembre.
Además, la UEFA aclaró que el resto de los partidos de las diferentes ligas se seguirán jugando a puertas cerradas, tal como sucede desde la reanudación del fútbol por la pandemia de coronavirus.
El Puskas Arena tiene actualmente una capacidad total para 67.215 personas, por lo que a la final entre Bayern Munich y Sevilla podrían asistir unas 20 mil personas, teniendo en cuenta el porcentaje permitido por la UEFA.
Bayern Munich jugará dicho trofeo luego de conseguir la Champions League el pasado domingo al vencer al Paris Saint Germain por 1 a 0, mientras que Sevilla se ganó su lugar tras alzar el título en la Europa League por el triunfo 3 a 2 frente al Inter en la definición.