Pol Fernández estuvo a préstamo en Boca durante un año y se convirtió en una pieza clave dentro del equipo de Miguel Ángel Russo. Su pase, perteneciente al Cruz Azul, valía poco más de 5 millones de dólares y según el comunicado del club de la Ribera iban a hacer uso de la opción de compra. Al parecer los planes del jugador fueron otros y decidió regresar a México. Los hinchas mostraron su enojo y desde el Consejo de Fútbol decidieron no utilizarlo más a fines de octubre a pesar de que su contrato era hasta el 31 de diciembre del 2020. Ante esto, mientras decide qué hacer, varios clubes del fútbol argentino se interesaron y tanto River, como Racing y San Lorenzo intentaron comunicarse con él.
La realidad es que, hace varios meses, dejó un comunicado en sus redes sociales y contó que no seguiría en el territorio. Frente a los nuevos rumores que lo acercaban al clásico rival, los hinchas del Xeneize mostraron todo su enojo a través de internet y lo acusaron de no respetar su palabra. Por esa razón, tras varias idas y vueltas y mucho silencio por parte del futbolista de 29 años, decidió romper el silencio. "Hay clubes grandes que se han fijado en mí y eso es algo muy lindo. Estoy muy contento porque se me nombre, pero quiero agradecerles públicamente tanto a River, San Lorenzo y Racing, pero como bien dije hace uno o dos meses, no jugaré en otro lado de Argentina", confirmó.
Siguiendo por las misma línea, el volante agregó: "No me gusta ver que hablen de mí, me gusta hablar poco. Decidí hacerlo porque se dijeron muchas cosas que no son verdad, se dijeron miles de cosas de mi entorno o que supuestamente yo pensaba, así que tenía que hablar". Y remarcó nuevamente: "Se dudó mucho de mi palabra, me duele, pero los que me conocen saben cómo soy. Quiero agradecerles públicamente. Voy a seguir mi carrera en Cruz Azul. Hablé con el presidente y el DT y me quieren. Por ahora no puedo jugar por un tema de papeles. Ayudaré desde donde me toque, pero me voy a quedar acá".
A su vez, refiriéndose a lo ocurrido con el Consejo de Fútbol de Juan Román Riquelme, contó: "Me comunicaron que si yo quería, no vaya más a entrenar. Gracias a mis compañeros seguí entrenando en el club. Me dolió muchísimo el comunicado, (Miguel Ángel) Russo me dijo que eran decisiones de la institución y yo las respetaba". Y sumó: "Yo fui y di la cara, no me manejé por teléfono, estoy tranquilo. Riquelme me llamó y me dijo que no me iban a renovar, en ese momento me dolió mucho y no la pasé bien".
Además, Pol Fernández admitió que creía, junto a su entorno, que lo iban a comprar pero reconoció que nunca tuvo los papeles "en la mano" para sellar la firma. "Yo estaba de acuerdo con renovar pero me tienen que avisar si van a cambiar las condiciones, no sé porqué lo hicieron. Es mas fácil pegarle a mi papa y a mi y no criticar las cosas que hacen algunos. Se como son las cosas", sentenció. De esta manera, a pesar de lo que se habló durante las últimas semanas, seguirá en México donde, antes de Boca, no sumaba minutos como titular.