Un grupo independiente de seguidores LGBTQ del Manchester United expresó su decepción después de que los jugadores no lucieron chaquetas especialmente diseñadas con ocasión de la campaña "Rainbow Laces" en el partido disputado el domingo en casa ante el Everton.
El grupo de aficionados Rainbow Devils había trabajado con el club en el evento en apoyo de la comunidad LGBTQ, pero los planes para que el equipo llevara las chaquetas de calentamiento Adidas fueron abandonados después de que un jugador se negó a participar, citando sus propias creencias religiosas.
"Poco antes del partido, se informó a Rainbow Devils de que no se llevarían estas chaquetas", afirmó la organización en un comunicado el miércoles. "El motivo fue que un integrante de la plantilla se negó a llevar la chaqueta por sus creencias personales. Por lo tanto, para mantener el espíritu y la unidad del equipo, ninguno de los jugadores la llevó".
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"Obviamente, esto supuso una gran decepción para los Rainbow Devils, pero también para todos aquellos que habían trabajado duro en el club para llevar a cabo este evento", agregó.
Los Rainbow Devils dijeron que respetan el derecho de los jugadores a tener sus propias opiniones y afirmaron que seguirán trabajando con el club en materia de inclusividad a través de la iniciativa One Love.
El club declinó identificar al jugador que se negó a llevar la chaqueta, pero defendió su apoyo a la inclusividad.
"El Manchester United da la bienvenida a aficionados de todos los orígenes, incluidos los miembros de la comunidad LGBTQ+, y estamos firmemente comprometidos con los principios de diversidad e inclusión", dijo el club en un comunicado.
"Los jugadores tienen derecho a tener sus propias opiniones individuales, en particular en relación con su fe, y estas a veces pueden diferir de la posición del club", añadieron.
(Reportaje de Martyn Herman; Edición de Christian Radnedge)
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