Mientras Jorge Messi negocia los pormenores de la conflictiva salida de su hijo Lionel del Barcelona con el presidente Josep María Bartomeu, desde Inglaterra ya dan por confirmado el arreglo con el Manchester City para que el argentino sea nuevo jugador del club inglés.
La reconocida cadena BBC fue la primera en brindar la información y rápidamente otros medios se hicieron eco. La misma habla de un arreglo por cinco años entre Messi y el City por una suma de 623 millones de libras, un poco más de los 700 millones de euros que vale la cláusula de rescisión del capitán del Barcelona.
El llamativo contrato que se da como hecho en Inglaterra ya se había deslizado en los últimos días y tiene la particularidad de que, a pesar de ser de cinco años, los tres primeros serían jugando para el equipo de Josep Guardiola y la posibilidad de que los últimos días sean en el New York City de la MLS, propiedad del mismo grupo empresario dueño del club de Manchester.
LA LLEGADA DE JORGE MESSI A BARCELONA
El padre y representante del capitán del Seleccionado argentino aterrizó en la ciudad condal para reunirse con Bartomeu y hablar del futuro de su hijo, que pretende abandonar el club de toda su vida haciendo uso de la cláusula que al final de temporada le permitía salir gratis.
Así lo expresó el 25 de agosto por medio de un burofax que provocó una enorme conmoción en Barcelona, y que llevó a la directiva culé a adoptar una postura de firmeza rechazando la posibilidad de que Messi quede libre.
El club recordó que el máximo goleador de la historia del Barcelona tiene contrato vigente hasta junio de 2021- podía rescindirlo ante del 10 de junio de este año y no lo hizo- y que si su intención es dejar la entidad debe efectuar el pago de su cláusula de rescisión de 700 millones de euros.
Los abogados de Messi entienden que debido a la crisis del coronavirus la temporada culminó más tarde, con lo que el contrato seguía vigente, y aplicando el espíritu de la norma, la estrella del Barcelona expresó su voluntad de irse diez días después de que culminaran las competiciones, un plano normal.
Por su parte, Bartomeu todavía no da por perdido al capitán y emblema culé y pretende ofrecerle una renovación hasta el mundial de Qatar de 2022.
Pero más allá de la disputa contractual, Messi, de 33 años, tomó la decisión de irse del club de toda su vida, rompiendo una relación de 20 años, con lo que ahora su padre tiene que negociar para evitar que todo termine en una cruenta batalla judicial.