Andrés Felipe Román no pasó la revisión médica en Boca Juniors, se le descubrió una miocardiopatía hipertrófica progresiva y el xeneize sigue en apuros para renovar su plantel de cara a los compromisos de 2021.
El lateral derecho de 25 años tiene un problema cardíaco que complicaría su carrera como profesional. Si bien el resto de los estudios dieron bien, lo cardiológico presentó inconvenientes hasta ahora desconocidos. El lateral sufre una miocardiopatía hipertrófica progresiva siendo una de las principales causa de muerte súbita. Se puede tratar pero, al parecer, no tiene cura.
El mercado de pases llega a su fin y entre los diferentes grandes, Boca Juniors fue el único que no logró incorporar en los puestos que necesitaba. Mientras River, Racing, San Lorenzo e Independiente consiguieron opciones, Miguel Ángel Russo solo podrá contar con un refuerzo de cara al primer semestre del año y que, todavía, no está a punto para saltar al campo de juego. ¿Qué pasó? Andrés Felipe Román, colombiano proveniente de Millonarios, viajó hacia Buenos Aires y se realizó los estudios médicos acompañado de Jorge Bermúdez. Cuando lo estaban por presentar de manera oficial, todo quedó suspendido y el pase se cayó.
¿Qué es la miocardía hipertrófica?
El médico Norberto Debbag, en diálogo con TyC Sports, explicó: "La miocardiopatía hipertrófica es una patología congénita, se da 1 cada 500 casos. Es un desarrollo excesivo de la masa muscular cardíaca. Aumentan las paredes de las cavidades del ventrículo izquierdo, se dilata la aurícula. La cavidad del ventrículo izquierdo, que expulsa la sangre a través de la aorta, está reducida y envía menos cantidad que el deportista con una cavidad normal". Y agregó: "El riesgo es grande para hacer deporte de alta competencia. En el esfuerzo, la cavidad del ventrículo es pequeña y no da suficiente sangre, el corazón sufre la falta de oxígeno. Ahí se produce una arritmia, principal causa de muerte súbita en el deporte en menores de 36 años".
Al mismo tiempo, refiriéndose a estudios previos, aclaró: "Es muy difícil que no aparezca, esto se detecta por el electrocardiograma, por las pulsaciones cuando escuchas el corazón -hay un pequeño soplo en la aorta- y el diagnóstico contundente lo da la ecografía". Mientras que sumó: "Si lo dejas tres meses sin hacer actividad física, como es un corazón fisiológicamente normal pero aumentado de tamaño, vuelve a su normalidad. Se vuelve a chequear y a hacer la resonancia magnética, que es mucho más precisa". Además aseguró que una posible operación es muy complicada y que "puede vivir sin problemas" dejando de jugar al fútbol, sin hacer grandes esfuerzos, para evitar el aumento de la frecuencia cardíaca.