El 21 de enero de 2019 un accidente aéreo conmovió al mundo del fútbol. El futbolista del Nantes de Francia, el argentino Emiliano Sala, murió luego de que el avión que lo llevaba a Cardiff sufriera un desperfecto y cayera al Canal de la Mancha. El hecho trágico despertó el dolor en el mundo del deporte y, además, alertó sobre las irregularidades que se presentan en las transferencias a nivel mundial. A dos años del hecho, la causa sigue en pie.
El fallecimiento de Emiliano fue un verdadero golpe para el fútbol. Si bien nunca debutó en el suelo argentino, como suele pasar con muchos jugadores nacionales, su carrera directamente comenzó en Europa en Primera División. En Francia pasó por el Orléans, Niort hasta llegar al Burdeos. Allí no tuvo una gran temporada y luego por un paso por otro club, finalmente llegó al Nantes donde sería su consagración. En total metió 42 goles en 120 partidos y esas estadísticas son las que vio el Cardiff City de la Premier League para hacerse con su pase.
Luego de una negociación, el jugador argentino finalmente viajó a Gales para empezar su entrenamiento. Allí encontró la muerte. Todavía se mantiene la duda sobre qué ocurrió en ese trágico viaje en el que Emiliano Sala cruzaba el Canal de la Mancha con David Ibbotson, un piloto de 59 años, del cual nunca se encontró el cuerpo.
El principal apuntado por la tragedia es David Henderson. El hombre de 66 años es acusado de haber facilitado la avioneta, de organizar el viaje y de poner en peligro la seguridad del jugador porque violó diferentes normas de la Autoridad de Aviación Civil y de otras entidades. Entre otras porque, justamente, habría ocultado los antecedentes de Ibbotson -el piloto de la tragedia-, quien entre otras cosas, no tenía entrenamiento de vuelo nocturno. Hasta el momento, se espera que se termine una investigación que, se cree, concluirá en marzo de 2021. Por otro lado, el juicio a Henderson por estas irregularidades, comenzaría recién en octubre de 2021. En un detalle llamativo, la defensa había pedido que el juicio no se lleve adelante en la ciudad de Cardiff porque podría tocar como jurado "algún hincha del Cardiff City que ya tengo su veredicto de antemano". Esa situación retrasó los tiempos del inicio.
A través de un informe, al principio de juicio, la División de Investigaciones de Accidentes Aéreos, sostuvo que la avioneta perdió monóxido de carbono durante el vuelo. En ese trayecto, el piloto trató de detener el avion, pero esas maniobras son las que llevaron a que la aeronave se rompa. Asimismo, en la investigación se demostró que el piloto no tenía entrenamiento nocturno, que estaba falto de práctica en la dependencia en solitario de un avión y, además, no tenía una licencia de piloto que le permitiera hacer el vuelo.
Más allá de estos avances, la propia familia de Emiliano Sala reclama que haya una investigación en mayor profundidad sobre las razones que existieron para que un futbolista tomase un avión tan riesgoso. Además, para que no haya dudas sobre lo que ocurrió verdaderamente esa fatídica noche.