En Brasil se viven horas convulsionadas que sacuden el mundo de la pelota. La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) será intervenida por el Tribunal Superior de Justicia Deportiva (STJD), luego de que el Tribunal de Justicia de Río de Janeiro confirmó la destitución de Ednaldo Rodrigues, actual presidente, por irregularidades en su asunción.
Este jueves, Brasil esperaba con ansias el sorteo de la Copa América 2024, que se realizará por la noche en Miami, sin embargo los focos viraron rápidamente a una situación que atraviesa las capas más profundas dirigenciales y que se remonta a pasados procesos que abrieron disputas en el poder del fútbol
La CBF será intervenida por la Justicia de Brasil
El medio Globo informó que, la votación de la 21ª Sala de Derecho Privado del Tribunal de Justicia de Río de Janeiro, arrojó que los tres jueces determinaron la destitución de Rodrigues por 3-0. Si bien el dirigiente puede presentar un recurso de amparo, se fijó que, en un lapso de 30 días, se deben llevar a cabo nuevas elecciones en la confederación para designar a un nuevo mandatario.
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El hecho tiene un sinfín de capítulos, pero con un inicio en 2017, cuando la Asamblea General que realizó la Confederación Brasileña de Fútbol intentó cambiar las reglas de las elecciones. Allí, el Ministerio Público del estado de Río de Janeiro denunció ante el tribunal que la votación se llevo a cabo sin la participación de los clubes. Marco Polo Del Nero estaba al mando de la CBF, pero fue reemplazado por Rogério Caboclo, quien, a su vez, fue escogido como nuevo presidente por el proceso de 2019 hasta 2023.
Sin embargo, a mediados de 2021, Caboclo fue suspendido y luego expulsado de la CBF por denuncias de acoso sexual. Ante el escándalo, la Corte de Río de Janeiro anuló la elección del dirigente acusado y determinó la intervención del ente que organiza el fútbol brasileño, que había quedado a cargo de Antonio Carlos Nunes, el vicepresidente.
Pero el problema se profundizó. En agosto de 2021, Ednaldo Rodrigues fue elegido como presidente interino, al menos hasta abril de 2023, fecha en la que debía finalizar el mandato del expulsado Caboclo. En marzo de 2022, Rodrigues firmó un convenio con el Ministerio Público de Río de Janeiro para confirmar las reglas electorales y, días después, fue elegido presidente para los siguientes cuatro años, situación que causó recelos en la entidad.
Los restantes dirigentes de la CBF argumentaron que Rodrigues no podía firmar el Término de Ajuste de Conducta, debido a que era presidente interino y le daba poder para lograr beneficios personales del acuerdo para presentarse nuevamente a las elecciones. Sin embargo, la entidad sostuvo en aquel momento el arreglo había sido legal, tanto como la elección de Ednaldo.
Pero, tras un año de investigaciones y presiones, la Justicia tomó cartas en el asunto y confirmó la destitución de Rodrigues, que desemboca en un conflicto de escalas inimaginables en Brasil. La intervención, entre varios peligros, genera que la CBF corra peligro de recibir una fuerte sanción de la FIFA, siempre en contra de estas prácticas, como ocurrió en AFA con la Comisión Normalizadora en 2016. Incluso, la entidad tiene en su estatuto marcado la prohíbición de la injerencia de terceros en los asuntos internos de las federaciones nacionales.
Y el caso podría escalar hasta el seleccionado y abrir otra problemática. En la actualidad, fernando Diniz es el enrtenador interino, y la CBF estaba a la espera de la decisión de Carlo Ancelotti, a quien le ofrecieron el cargo a partir de junio de 2024 y, con esta situación, todo indica que el italiano podría dar marcha atrás con su elección de llegar a Sudamérica.