Boca Juniors sufrió esta noche un duro golpe en su visita a Talleres de Córdoba, con el que perdió merecidamente por 2 a 1 en partido de la tercera fecha de la Liga Profesional de Fútbol.
En el Mario Alberto Kempes, los goles de Talleres fueron de Michael Santos (28m PT) y "Equi" Fernández en contra (6m ST). Boca decoró el resultado con un tanto de Luca Langoni (37m ST): la diferencia entre el juego de uno y otro fue mucho mayor.
Talleres suma seis unidades y es uno de los escoltas del hasta aquí único líder, su clásico rival, Belgrano (7). Boca, que con un triunfo habría alcanzado al "Pirata" en la cima, perdió el invicto y quedó con cuatro unidades (un triunfo sobre Atlético Tucumán y un empate con Central Córdoba de Santiago del Estero).
Talleres fue superior en el balance del primer tiempo y por eso llegó al descanso con un triunfo parcial muy merecido.
Los primeros pasajes del encuentro fueron parejos, con ambos equipos intentando circular la pelota con prolijidad, buscando pacientemente los espacios. Boca trató de crecer desde el manejo de Óscar Romero, involucrado en la conducción en esos instantes iniciales, y Talleres lo hizo con Garro y Pizzini.
Pero a medida que fue pasando el tiempo la "T" construyó una mejor imagen desde la concentración, la intensidad y el compromiso en la presión y la recuperación. Los de Hugo Ibarra, que sufrieron un cambio rápido (Orsini salió lesionado y entró Merentiel), se mostraron poco metidos en el encuentro. Y dejaron huecos que el local fue, de a poco, aprovechando.
Así lo tuvo primero Villagra, que remató desviado luego de una buena maniobra colectiva; lo tuvo después Catalán, que llegó hasta "Chiquito" Romero en una jugada individual; y lo tuvo Santos, que recibió de Villagra y remató al palo.
En la siguiente el uruguayo no falló: recibió tras una "carambola", superó a Romero y esperó la convalidación del VAR para desatar el festejo. Merecido, igual que el triunfo transitorio. El equipo de Gandolfi tuvo menos la pelota pero no sufrió en su arco.
Para el complemento, el "Negro" Ibarra apostó al ingreso de "Equi" Fernández para darle equilibrio al medio y al de Langoni por Ramírez para ganar peso en el ataque. Y en los primeros minutos pareció que funcionaba, pero fue solamente una ilusión.
A los 6m aumentó Talleres, con un gol en contra del propio "Equi" (quiso cortar un avance en el área de Pizzini y no hizo más que confundir a "Chiquito" Romero, que de todos modos pareció algo lento en su reacción). Y a los 10m Boca se quedó con diez por expulsión de Villa a instancias del VAR (agresión a Benavídez que el árbitro Herrera no había advertido).
A partir de allí Talleres tuvo varias oportunidades para seguir ampliando el resultado. Villagra, en una gran maniobra individual, perdió en el mano a mano con Romero; Santos remató desviado; Bustos, que había entrado en reemplazo del goleador uruguayo, se equivocó al "picarla" solo frente al arquero boquense.
Esa sucesión de errores en la definición lo llevó a sufrir más de lo previsto, porque a los 37m descontó Langoni. Y tuvo que intervenir Herrera con una reacción brillante para evitar el empate ante un cabezazo de Figal. Pero finalmente la "T" pudo aguantar el resultado, festejó en grande y le dio, lo dicho, un golpazo a Boca.
En la próxima jornada, cuarta del certamen, Talleres volverá a ser local, ahora ante Central Córdoba de Santiago del Estero (domingo 19 a las 21.30) y el "xeneize" recibirá en la Bombonera a Platense, el mismo día pero a partir de las 19.15.