Las horas y días siguen pasando y Marcelo Gallardo aún no puede contar con una de sus proridades para el actual mercado de pases de River Plate. A la espera de que el "Millonario" destrabe su situación en medio de un complicado contexto económico del país y pueda girar el pago en dólares a Junior y Palmeiras, Miguel Borja se entrena a contraturno de sus compañeros en el equipo colombiano y presiona con su deseo de llegar a Argentina.
Desde que River posó sus ojos en él y comenzó con las negociaciones para adquirir su ficha, el delantero de la Selección de Colombia decidió tomar una postura determinante y entrenar diferenciado: si el plantel se junta por la mañana, él va por la tarde y viceversa. Como era de esperar, tampoco fue citado por su entrenador para el debut de este jueves del conjunto de Barranquilla en el torneo local contra Patriotas.
Si bien los dirigentes del club de Núñez insisten por el exjugador de Olimpo de Bahía Blanca, en Colombia ya lo dan casi por caído el pase. Es que la preocupante situación económica que atraviesa Argentina dificulta que el "Millonario" pueda efectuar el monto en dólares, por la medida excepcional que tomó el Banco Central argentino con el supercepo, que impide la salida de divisas en moneda extranjera y, en consecuencia, le puso un stop a la trasnferencia.
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Desde el equipo barranquillero, enterados del conflicto económico que vive Argentina, exigieron una medida inmediata que traiga una solución en la negociación. Desde "El Tiburon" sostienen que no es bueno para nadie que Borja lleve más de una semana sin entrenar con el plantel profesional y comienzan a perder la paciencia ante la falta de novedades que conlleven a un desenlace óptimo.
Mientras tanto, en las oficinas riverplatenses tomaron la determinación del centrodelantero con buenos ojos, ya que les da más tiempo para tratar de destrabar el problema con el BCRA y, finalmente, poder girar los dolares hacia Colombia para cerrarlo antes del 11 julio, fecha límite para inscribir jugadores en la AFA. En principio, el día final para anotar incorporaciones iba a hacer el jueves 7, pero los equipos que tienen jugadores que se marchan libres, en el caso de River Benjamin son Rolheiser y Fabrizio Angileri, tendrán cuatro días más para fichar refuerzos.
Aunque desde el "Millonario" admiten que la negociación está difícil por el contexto de la economía nacional, también aducen que la postura de Junior complica aún más las cosas por exigir más garantías de las usuales. En la última propuesta, el club de Barranquilla rechazó los documentos que les ofrecían para avalar el pago del adelanto de u$s 1,5 millón. La novel pinta para un par de capítulos más.
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