Durante el partido entre Boca y Palmeiras en la Copa Libertadores hubo una jugada que llamó la atención de todos y que tuvo que ver con un lujo -que enfureció a todos- de Valentín Barco. El juvenil xeneize tiró una jugada que hizo enojar a todos los que estaban presente en la cancha.
Sobre el sector derecho de la cancha, Valentín Barco se subió a la pelota y se ganó una tremenda patada por parte de los jugadores brasileños. El lateral, que tuvo un gran partido en el primer tiempo, tiró una jugada maravillosa que, incluso para muchos, podía ser vista como una "canchereada", pero que en realidad sirvió para hacer enojar a sus rivales.
Palmeiras había dominado los minutos previos pero sin grandes aproximaciones: la más clara había sido un remate de media de distancia de Gabriel Menino que atajó Sergio Romero a los 14. A partir del gol de Boca, el elenco argentino creció con más actitud que juego, mientras que Palmeiras sintió el golpe, bajó su nivel y no generó sobresaltos para la visita pese a alguna chance aislada sin mucho peligro.