Después de un largo tiempo, finalmente la estatua de Diego Armando Maradona llegó al aeropuerto Internacional de Ezeiza. La gigante escultura está emplazada en el primer piso de la terminal A y respeta la altura real del astro del fútbol mundial.
La escultura tiene la camiseta de la Selección con el escudo de la AFA y el 10 en la espalda. Cerca del pie izquierdo, vestido con los botines característicos de Maradona, además -por supuesto- la figura tiene una pelota.
La idea de que Maradona tuviera una estatua en el principal aeropuerto del país se remonta a una historia de años entre el mismo Diego y Eduardo Eurnekian, fundador de la compañía Aeropuertos Argentina 2000. El empresario y el mejor jugador de fútbol de todos los tiempos tuvieron una larga amistad. En una ocasión, Eurnekian le planteó la idea de realizar una estatua y Maradona le comentó que le gustaría que estuviera emplazada en el aeropuerto de Ezeiza, para que pudieran verla quienes parten y llegan al país.
En un acto íntimo previo a su viaje, Claudia Villafañe con sus hijas Dalma y Giannina y Lalo Maradona, visitaron la estatua en el aeropuerto antes de embarcar a la Maradona Cup en Arabia Saudita, en la que Boca Juniors venció por penales al Barcelona.
La escultura fue elaborada bajo la técnica de impresión 3D a partir de tereftalato de polietileno (más conocido como PET). El proceso de fabricación comenzó con la recolección de imágenes de Maradona en el mundial de México 86’, en el momento del himno nacional, concentrado en lo que se vendría, la final del mundo. La producción total llevó diez días y tuvo un puntilloso proceso de realización. El diseño fue efectuado por artistas digitales en software 3D, superponiendo diferentes imágenes para lograr los detalles y expresiones que identifican a Diego. Con el archivo 3D realizado, se segmentaron en diversas piezas, de manera digital, para luego unirlas como un rompecabezas una vez fabricadas con impresión 3D. Se utilizaron 40 equipos imprimiendo en simultáneo para la fabricación.
Posteriormente a la unión de las piezas, se efectuaron, a mano, los detalles artísticos para darle el carácter de Diego Armando Maradona como todos lo conocemos. Por último, la figura fue coloreada con pintura automotriz, consiguiendo la textura característica de un monumento metálico. El resultado es una escultura que mezcla pasión, arte y la última tecnología en fabricación digital para inmortalizar al astro del fútbol mundial.