El entrenador Ricardo Caruso Lombardi, quien se encuentra alejado de la actividad profesional, fue citado por la Justicia para declarar en la causa contra Generación Zoe por asoaciación ílicita. Deberá explicar el contrato que tenía con la empresa que gerenciaba a Deportivo Español, donde trabajó como Manager durante algunos meses. El presidente del club, Diego Elías, también fue notificado para presentar testimonio en el caso.
Caruso Lombardi tendrá que brindar declaración el 2 de agosto, en calidad de testigo. Si bien el lugar para comparecer es en Villa María, Córdoba, sus abogados están gestionando la posibilidad de que se realice de manera virtual, ya que se encuentra en Buenos Aires y aún no está imputado en la causa que tiene varios detenidos, entre ellos al CEO de la empresa, Leonardo Cositorto.
El motivo del llamado a indagatoria al mediático DT es por el vínculo que tuvo la empresa con el equipo que milita en la divisional C del fútbol argentino. En el que Caruso Lombardi, además de trabajar en la parte futbolística, llegó a mostrarse en entrevistas públicas con remeras de Generación Zoe.
El mismo Cositorto, que se encuentra detenido en Córdoba desde abril de 2022, había confesado cómo era el arreglo con el exentrenador de Racing y San Lorenzo: "Caruso Lombardi me sale costoso, pero una pautita televisiva en TyC Sports te sale 100, 200 mil pesos". Cuando explotó el caso en todo el país, Ricardo trató de separarse del escándalo por la acusación de asociación ílicita de la empresa y en febrero manifestó ante los medios: "Cuando yo llegué a Español todo lo relacionado a Zoe ya formaba parte de la estructura del club y yo me adapté a eso".
Elías, que tiene fecha de declaración para el 8 del mismo mes para aclarar los negocios de Generación Zoe con Deportivo Español, en marzo había expresado: "Yo no soy ningún chiquilín en el mundo de los negocios, creo en Dios y nos lo van a devolver por 4. Nosotros recibimos la plata en las oficinas de Zoe". Y luego, había añadido: "La realidad es que Cositorto siempre cumplió con nosotros. Yo no elijo la manera en la cual me pagan, la realidad es que Deportivo Español no tiene una apertura de cuenta".
A pesar de la palabra de ambos involucrados, el contrato entre Caruso y Zoe dejó expuesto que no se trataba de un simple sponsoreo en el club, sino que también existía un gerenciamiento que no se había comunicado a los socios. Además del arreglo que colocaba al entrenador como Manager Deportivo, quedaron en evidencia los $5 millones netos cada tres meses que cobraría por varias tareas relacionadas al fútbol y por darle difusión a la empresa, dada su facilidad para atraer a los medios. Pero dichas ganancias no serían las únicas, ya que percibiría porcentajes correspondientes a los derechos económicos de los jugadores y un premio de U$S 100.000 en caso de que el equipo lograra el ascenso.