El plan de Milei para el fútbol argentino: "modelo inglés", sociedades anónimas y privatización

Durante la campaña, el presidente reveló cuál era su deseo para el fútbol argentino. Una dirigente de su espacio sostuvo que el proyecto puede aparecer en la Ley Omnibus.

19 de diciembre, 2023 | 16.45

El fútbol argentino ingresó en un cuadro de incertidumbre desde la confirmación de Javier Milei como presidente de la Nación. Su idea impulsar la llegada de las Sociedades Anónimas Deportivas, un viejo anhelo de Mauricio Macri, abre un sinfín de interrogantes entre los clubes que rechazon dicha medida. En la práctica, el líder de La Libertad Avanza planea un esquema integrado a la Ley Ómnibus, un gran paquete de reformas que se enviará a la Cámara de Diputados, que si bien suena ambicioso, también destruyó la chance de acceder a las clases populares: el modelo inglés.  

"Es un sistema que puede ser optativo. Los clubes pueden tomarlo o no. No es una privatización, es el sistema inglés. Los clubes que quieran crecer de ligas inferiores a superiores mediante el apoyo de empresarios internacionales van a tener la posibilidad y los que no, no", había afirmardo la diputada de Juliana Santillán de L.L.A. luego de una reunión con el ministro del Interior, Guillermo Francos, sobre el posible arribo de las S.A.D, la pasada semana. Esa declaración de principios, por una de las elegidas por Milei para instalar el tema en la agenda, fue la última manifestación pública del espacio. Un aviso de lo que puede llegar a venir. 

En la misma afirmación, Santillán nombró a Guillermo Tofoni, dueño de la empresa World Eleven que tuvo hasta hace unos meses los derechos de la organización de los amistosos de la Selección Argentina y que mantiene un juicio con la AFA. La diputada señaló al empresario "como una de las personas que explique las funciones y cómo trabajar industrias tan complejas de las cuales no se conoce el paño". Tofoni, quien se autodenominó "el hombre de Milei en el fútbol", escribió en septiembre pasado una nota de opinión titulada "Dolarización y fútbol: la tierra prometida", en la que nombra los ejemplos de Mandiyú de Corrientes y Blanquiceleste en Racing, clubes que terminaron en crisis y con empresas fundidas. Lejos de la panacea con la que intentan presentar la idea, el arquetipo del fútbol inglés tiene células de negocios más cercanas a irregularidades y lavado de dinero que a una confiable administración.

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El modelo inglés en el fútbol: millones para algunos, acceso para pocos

El torneo de Inglaterra es el modelo que aspira Milei, según reconoció durante una entrevista con Alejandro Fantino, en 2023: “A mí me gusta el modelo inglés, no les va mal. La pregunta es cómo se financia. Las sociedades anónimas, de hecho, tienen clubes que cotizan en bolsa y todo. ¿A quién carajo le importa quién es el dueño si le ganás a River cinco a cero y sos campeón del mundo? ¿O preferís seguir en esta miseria que tenemos cada vez de fútbol de peor calidad? ¿Cómo nos va cada vez que salimos afuera de la Argentina?”. 

La Premier League nació con ese nombre en 1992, cuando en la búsqueda de acabar con la violencia de los Hooligans, los clubes de Primera pegaron un portazo y se apartaron de la Football Association (FA), el ente que organiza los torneos desde 1888, y firmaron un contrato multimillonario con la televisión paga. La tragedia de Hillsborough, en la que 96 hinchas de Liverpool muieron aplastados en una tribuna del estadio homónimo, fue un espaldarazo para que el gobierno de ultraderecha de Margaret Thatcher culpara a los violentos del hecho, auque la investigación oficial determinó que fue responsabilidad total de la policía.

Thatcher incentivó los créditos públicos para hacer una modernización en los estadios, desreguló la financiación y la Premier aprovechó el viento para captar capitales extranjeros. SIn embargo, con la connivencia con medios de comunicación para eliminar los Hooligans, fue letal con el verdadero propósito: sacar a los hinchas de clase trabajadora de las canchas y trasladarlos a los famosos pubs, que no formen parte del show y apuntar a la clase media pudiente. La desregulación de precios sacó a las clases populares del fútbol y enseguida se observaron los cambios deseados. El precio medio de las entradas subió un 600% entre 1990 y 2008, los hooligans desaparecieron, pero también las familias y jóvenes: la edad promedio del hincha en los estadios roza los 50 años.

El crecimiento fue abrupto, pero no sorpresivo. De los 20 equipos de Premier League en la actualidad, 17 tienen dueños de Arabia Saudita, Estados Unidos y Emiratos Árabes Unidos, mientras que los tres restantes (Brighton, Brentford y Tottenham) pertenecen a ingleses. Según un estudio de Annual Review of Football Finance 2022, realizado por la consultora Deloitte, reveló que se prevé que la Premier League facture 7.110 millones de euros durante la temporada, el 22% del total del negocio del fútbol europeo y más de un tercio de las cinco grandes ligas. En el segundo lugar de la lista aparece LaLiga de España, muy lejana en cuanto a mayor negocio agregado: 3.277 millones, menos del doble que lo amasa la liga inglesa.

Uno de los mayores activos de la Prmier League es el Fondo de Inversión de Arabia Saudita, que también es dueño de Al Hilal, Al Ittihad, Al Nassr y Al Ahli, equipos que compraron jugadores de Inglaterra como Fabinho, Rubén Neves, Kalidou Koulibaly, Edouard Mendy, y N’Golo Kanté. En 2022, el empresario estadounidense Todd Boehly, compró al Chelsea junto a través de Clearlake Capital, sin antes negar ante Premier League los vínculos con el Fondo de Inversión Pública que había denunciado una investigación el diario inglés Daily Mail. La violación a las reglas de la liga es un punto que, según convenga, puede traer un fuerte dolor financiero en caso de encontrar culpables. Sin embargo, eso no impidió que Boehly transfiera a Koulibaly, Kanté y Mendy a Arabia Saudita en casi 100 millones de libras esterlina. 

Con esta historia, tanto Milei como sus designados para plantar el proyecto privatizador insisten en que cada club tendrá la libertad para elegir su modelo de club. El 23 de noviembre pasado, durante una Asamblea Ordinaria en AFA, dirigentes del fútbol argentino rechazaron por 45 a 0 la chance de que los clubes sean Sociedades Civiles a Sociedades Anónimas Deportivas, la única institución ausente fue Talleres de Córdoba, cuyo presidente es Andrés Fassi. La historia del fútbol argentina tiene más de un ejemplo de mala administración, pero, ante todo, un largo camino de defender con uñas y dientes las asociaciones civiles, un pilar fundamental para el reconocimiento de sus propias raíces y que promociona el potrero y costado social. El fútbol argentino tendrá otra batalla por delante, a partir de 2024, para reivindicar su historia.