El fútbol argentino recibió una triste noticia en el inicio del 2022. El exárbitro Jorge Vigliano, padre de los colegiados Mauro y Paulo, falleció este jueves 6 de enero a sus 78 años. Luchó durante mucho tiempo contra el cáncer de garganta y cinco días antes de su muerte sufrió una descompensación a causa de una afección pulmonar. Por esta razón, lo trasladaron de urgencia a un hospital cercano a su casa ubicada en City Bell.
Minutos después de confirmarse su deceso, tanto la Asociación Argentina de Árbitros (AAA), en la que cumplió la función de Secretario General, como la AFA, enviaron sus respectivas condolencias a través de las redes sociales. También lo despidieron con sentidas palabras excompañeros de radio y exalumnos de educación física. Entre otros cargos importantes que ocupó, se desempeñó como presidente de la Escuela Superior Platense de Árbitros.
"El Arbitraje Argentino está de Luto. En el día de hoy, lamentamos informar el fallecimiento de Jorge Vigliano, quien marcó el legado del amor por el arbitraje. Padre de Mauro, Paulo y Enzo. Quien gestionó, luchó, se comprometió y defendió los derechos de la familia arbitral como Secretario General de nuestra institución", comenzó el comunicado de la Asociación Argentina de Árbitros.
"Quien transmitió su convicción y formación a las nuevas generaciones siendo Docente de nuestra Escuela de Árbitros y Profesor en la AFA. Una de las personas más queridas de nuestro ambiente, hoy nos seguirá inspirando gracias a su grato recuerdo. Te vamos a extrañar Jorge. Acompañamos a familiares y amigos en este momento", concluyó la carta que también compartieron en las redes de la Asociación del Fútbol Argentino.
El momento icónico de su carrera y una imagen increíble
Corría el año 1984 y Jorge Vigliano dirigía un partido muy caliente entre Independiente y Ferro Carril Oeste en cancha del "Rojo". El elenco de Caballito, entonces dirigido por el histórico Carlos Timoteo Griguol, era uno de los más destacados equipos del momento. Se enfrentaba ante los de Avellaneda, que eran los últimos campeones de América, en un histórico duelo que terminó 3 a 1 en favor del "Verde".
El conjunto visitante abrió el marcador con el tanto de José Luis Carrizo a pesar de los ataques constantes del local. Alberto Márcico convirtió el segundo aumentando así la ventaja. Llegó el descuento en los pies de Gustavo Crnko, y minutos después el árbitro se llevó la peor parte. El público reclamaba todas las posibles infracciones y en medio de una queja, el colegiado recibió un tremendo piedrazo en la cabeza.