Iga Swiatek, defensora del título, dio un gran paso el jueves hacia su tercer campeonato consecutivo en el Abierto de Francia al derrotar en semifinales a la estadounidense Coco Gauff, tercera cabeza de serie, por 6-2 y 6-4.
Swiatek, cuatro veces campeona de torneos del Grand Slam, igualó su racha de victorias más larga sobre tierra batida y también amplió su dominio sobre Gauff al sellar su undécima victoria en 12 enfrentamientos.
La derrota fue un duro golpe para Gauff, que fue derrotada por Swiatek tanto en la final de 2022 como en los cuartos de final del año pasado, pero se marcha de París sabiendo que el lunes ascenderá al número dos de la clasificación mundial.
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"Creo que está progresando mucho", dijo Swiatek sobre la campeona del Abierto de Estados Unidos, de 20 años. "Se puede ver por sus resultados. En el US Open del año pasado demostró que es dura. A esta edad, es obvio que va a crecer. Es bonito verla manejar bien todo lo que la rodea, porque no es fácil".
"Estoy segura de que tendremos muchos más partidos intensos al más alto nivel. Coco es una de las jugadoras más regulares que hay", agregó.
En la final del sábado, la polaca enfrentará a la italiana Jasmine Paolini, duodécima cabeza de serie, que en el otro partido del día superó a Mirra Andreeva, de 17 años, por 6-3 y 6-1.
Swiatek rompió el servicio de su rival en el primer juego tras un error de Gauff, y la polaca levantó puntos de quiebre en contra en los dos games siguientes antes de afianzar su dominio en el partido.
Tras perder el primer set, Gauff se puso en ventaja en el segundo parcial, pero la polaca se recuperó y dejó el marcador 4-3 para acercarse a su vigésima victoria consecutiva en Roland Garros.
En una pista Philippe-Chatrier con un sol radiante, Swiatek, campeona de Madrid y Roma, se aseguró la victoria con su saque e igualó su racha de 18 victorias consecutivas en polvo de ladrillo.
PAOLINI, A LA FINAL
Por su parte Paolini, de 28 años, es la primera italiana que alcanza la final en París desde Sara Errani en 2012. Su victoria se produjo dos días después de que su compatriota Jannik Sinner llegara a semifinales en el cuadro masculino, garantizándose ser número uno del mundo la próxima semana.
Andreeva, que había ganado su anterior partido contra Paolini en Madrid en abril, no supo aprovechar las pocas oportunidades que tuvo, y cometió demasiados errores no forzados para tener alguna posibilidad en la que fue la primera aparición de ambas jugadoras en una semifinal de Grand Slam.
"Fue un partido difícil, ella está jugando increíble, tiene 17 años, es muy completa, así que estaba un poco nerviosa antes del partido", dijo Paolini, duodécima cabeza de serie. "Perdí contra ella hace un mes así que me dije, vamos, tienes que hacerlo mejor. Hoy estaba nerviosa en el primer set pero luego, bola tras bola, me fui relajando".
Andreeva logró mantener a su rival a raya con profundos golpes de fondo en sus juegos de servicio en un comienzo de partido cautivador.
Paolini rompió el servicio de su rival para sacar ventaja de 3-1 y salvó tres puntos de quiebre para extender la ventaja a 4-1. Luego sorteó otros dos puntos de quiebre en el séptimo juego antes de sentenciar el set inicial en su primera oportunidad.
La italiana rompió pronto en el segundo set y ya no tuvo problemas, cerrando el triunfo con otra derecha ganadora en el primer punto de partido después de que Andreeva perdiera completamente el rumbo.
Con información de Reuters
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