Charles Leclerc recibió el viernes una penalización de 10 puestos en la parrilla de salida, propinando un duro revés a Ferrari en sus esperanzas de ganar el título de constructores de Fórmula Uno por primera vez desde 2008.
El piloto monegasco marcó el mejor tiempo en la primera sesión de entrenamientos en Yas Marina, pero Ferrari reveló entonces que había cambiado la batería de su monoplaza, lo que provocó una sanción automática por incumplimiento del reglamento.
La FIA confirmó en un informe técnico que Leclerc estaba utilizando su tercer acumulador de energía de la temporada, uno más de los permitidos.
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Ferrari está a 21 puntos del líder McLaren -que ganó por última vez el título de constructores en 1998-, con 44 puntos aún en disputa el domingo, mientras que Red Bull marcha tercero, sin aspiraciones ya.
Leclerc rodó con un mejor tiempo de un minuto 24,321 segundos, seguido por el McLaren de Lando Norris a 0,221 segundos y los Mercedes del heptacampeón mundial Lewis Hamilton y George Russell.
Sin embargo, Hamilton estaba siendo investigado por los comisarios por obstaculizar supuestamente a Norris. La carrera del domingo será la última del británico con Mercedes antes de incorporarse a Ferrari como sustituto de Carlos Sainz.
Pierre Gasly fue el quinto más rápido con Alpine, mientras que su nuevo compañero de equipo, el australiano Jack Doohan, sólo pudo ser 19º en la preparación de su primera carrera como sustituto de Esteban Ocon.
Por primera vez en la F1, dos hermanos salieron a la pista para el mismo equipo en la misma sesión: Leclerc estuvo acompañado por su hermano menor Arthur (18º) en el otro Ferrari, pilotado habitualmente por el español Sainz. Seis de los 10 equipos tenían a un joven piloto al volante de uno de sus autos, cumpliendo así con la obligación de darles tiempo en pista.
(Editado en español por Carlos Serrano)
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