El asesinato del jugador de Barracas Central, Lucas González, golpeó al país durante el jueves 18 de noviembre. Fue víctima de gatillo fácil y así dejó atrás una vida cargada de sueños y objetivos por delante por culpa de la policía de la Ciudad de Buenos Aires. La Asociación de Fútbol Argentino, como entidad que regula el deporte, tomó una importante decisión con respecto a la muerte del joven de 17 años oriundo de Florencio Varela.
Luego de varias horas de agonía finalmente se confirmó su deceso. El pasado miércoles 17 del corriente salía de un entrenamiento junto a sus compañeros y un auto sin identificación policial comenzó a perseguirlos. Lanzaron tres balazos y la gran promesa del conjunto de Barracas recibió dos en la cabeza. Lo trasladaron al Hospital Penna y más tarde al nosocomio de alta complejidad en El Cruce de Varela donde más tarde falleció.
La AFA dispuso tres días de duelo por el crimen de Lucas y lo anunció a través de un comunicado en el Boletín 6018. En el mismo suspendió todas las actividades de las divisiones juveniles de este fin de semana. El club, horas antes, también decretó tres días y se sumó a casi todas las instituciones del fútbol argentino quienes dejaron sus mensajes de apoyo y condolencias por lo sucedido.
"En señal de Duelo, con motivo de la trágica muerte del jugador Lucas González, se suspende la actividad de las Divisiones Infantiles y Juveniles programada para los días viernes 19, sábado 20 y domingo 21 de noviembre. Esta lamentable pérdida enluta al fútbol argentino todo, el que acompaña con pesar a sus familiares y amigos en estos dolorosos momentos", fueron las palabras que utilizó la entidad madre del mencionado deporte en Argentina.
Las declaraciones de la madre de Lucas
Desde la puerta del hospital El Cruce, del partido bonaerense de Florencio Varela, donde permanecía internada la víctima hasta que finalmente murió este jueves 18 de noviembre, dijo a Télam que "la idea" era llevarse a su hijo a su casa, "Tenía todas las esperanzas". "La Policía me lo mató, yo no voy a descansar hasta que ellos paguen lo que le hicieron a mi hijo, porque nos arruinaron la vida".
Luego, agregó: "¿Yo ahora como sigo? Yo no puedo ahora, tengo dos hijos y no tengo fuerzas para nada, yo no puedo entrar a mi casa y no encontrarlo". Ustedes (los policías implicados) me destrozaron la vida, me lo mataron, me lo dejaron todo entubado, moreteado con dos balazos en la cabeza, así que lo único que quiero es Justicia y que mi hijo descanse en paz", concluyó conmovida.