Imputaron a los hinchas de Deportivo Cali que fueron detenidos en la previa del partido contra Boca. La historia del viaje a Argentina de los hinchas colombianos da para escribir un libro. Luego que se desatara una guerra entre los barras colombianos y los de Racing por el robo de una bandera del club de avellaneda, que entre otras cosas tuvo en el medio secuestros y torturas, hoy se sumó un capítulo más: el fiscal Carlos Caputo imputó a 26 simpatizantes del equipo caleño que habían sido detenidos entre el miércoles 25 y el jueves 26 de mayo, por los delitos de desobediencia y resistencia a la autoridad y portación de armas no convencionales.
Ocho de los acusados fueron aprehendidos en el Obelisco el pasado miércoles, cuando los fanáticos realizaron un banderazo para apoyar a su equipo horas previas al partido que se disputó en la noche del jueves con el "Xeneize". Los agentes de la Policía de la Ciudad, que realizaban tareas de prevención, encontraron tres armas blancas en su poder (un cuchillo, un machete y una navaja). Por estos hechos, fueron indagados por el fiscal de la Unidad de Flagrancia Este del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, quien los imputó por los delitos mencionados. De este grupo de detenidos, una persona tiene domicilio en la Provincia de Salta, mientras que los restantes siete provenían desde Chile. Se les otorgó la libertad alrededor de las 20 horas.
Ocho de los acusados fueron aprehendidos en el Obelisco el pasado miércoles
Por su parte, el otro grupo está compuesto por 18 personas provenientes desde Colombia, que vinieron exclusivamente para asistir al partido en el Estadio Alberto J. Armando. Todos los individuos habían sido capturados el jueves, mismo día del encuentro de Copa Libertadores, en la intersección de la calle Cecilia Grierson y Avenida de los Italianos, en Puerto Madero. Este viernes 27, Caputo les tomó declaración indagatoria a los 18 detenidos, a los también imputó por los delitos de desobediencia y resistencia a la autoridad y portación de armas no convencionales. Tras la imputación y las declaraciones, salieron en libertad.
En este procedimiento, realizado por personal policial de la División Conductas Delictivas de la Policía de la Ciudad y del Cuerpo de Investigaciones Judiciales del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, se realizó una requisa que dejó varios obtejos contundentes como evidencia: se secuestraron 24 cuchillos, 4 navajas, 5 destornilladores, un fierro con punta y mango de madera, una manopla de metal, cinco bengalas de humo sin uso y una gran cantidad de botellas de vidrio de bebidas alcohólicas. Además, fueron secuestradas 83 entradas, 50 generales por un valor de 3.000 pesos y 33 entradas de protocolo, inscriptas con la leyenda “prohibida su venta”.