Copa América 2021: conmovedor abrazo entre Messi y Neymar tras el título

El astro brasileño se acercó a su amigo para felicitarlo por el título conseguido en el Maracaná. Abrazo inmenso en el medio del campo de juego.

11 de julio, 2021 | 00.16

El pitido final retumbó con fuerza en el estadio Maracaná y la gente explotó en la tribuna que flameaba los colores celeste y blanco. Rápidamente, la cámara se dirigió a Lionel Messi que se dejó caer de rodillas en el histórico campo de juego y se tapó la cara con las manos, deshecho en lágrimas. Sus compañeros se acercaron, lo levantaron y comenzaron a lanzarlo hacia arriba en un festejo inolvidable. Del otro lado, la desazón de Neymar Junior. También caído de rodillas, llorando de tristeza y con las manos al cielo, rezando.

Varios compañeros intentaron calmar al astro brasileño, que se encontraba devastado por haber perdido la Copa América. Recordemos que cuando Brasil consiguió el título hace dos años, estaba lesionado y no formó parte de dicho plantel. Cuando pudo recuperarse y ponerse de pie, no dudó. Con la mirada perdida, con algunas lágrimas todavía, comenzó a buscar entre la multitud albiceleste. Y cuando divisó la "10" se acercó a su amigo, que ya lo esperaba para darle la mano.

Choque de palmas y un enorme abrazo emocionante y conmovedor mientras conversaban. Duró varios minutos, se quedaron allí, abstractos con respecto a lo que pasaba a su alrededor y los festejos del seleccionado nacional. Posiblemente, Neymar, a pesar de su tristeza, le mostró su felicidad por verlo triunfar con la Selección Mayor. Una deuda que, sin lugar a dudas, le dolía a la "Pulga" y de la cual él tenía amplio conocimiento tras acompañarlo durante varios años en Barcelona. También, uno a uno, saludó a todos los jugadores argentinos.

Mirá el momento:

 

 

Cuando recibió la medalla de plata, Neymar se la sacó, la miró un par de veces y desapareció por el túnel. Parecía que no iba a volver a aparecer pero el brasileño nos regaló una imagen más que especial. Sentado en las escalinatas camino a los vestuarios, charlaba tranquilamente con Leandro Paredes -amigo y compañero del París Saint Germain-, con algunas risas de por medio. Minutos después se acercó Ángel Di María, con quien también comparte equipo y luego, nada más y nada menos que Lionel Messi. Otra vez se abrazaron y el capitán argentino se señaló la camiseta, se la sacó y la intercambiaron como recuerdo. Seguido de esto, la "Pulga" se sentó y se quedaron hablando un rato largo como si fuera el barrio.

Mirá el momento: