Este domingo 2 de abril se cumplen 41 años del desembarco de las tropas argentinas en las Islas Malvinas para defender al país de Gran Bretaña, quien tomó poder sobre las mismas desde 1833. En esta fecha se homenajea a aquellos soldados que dejaron su vida en combate ya que en el año 2000 se estableció como el "Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas". El Destape dialogó con uno de los hombres que no sólo representó a Argentina, sino que años después lo hizo también en un Juego Olímpico como boxeador.
Se trata de Rubén Carballo, mejor conocido como "Cata", quien luego de sobrevivir al conflicto bélico se quedó en Buenos Aires junto a sus compañeros, retomó su vida en el boxeo y dejó una huella en el deporte de los puños. "Cuando llegué me encontré con algo muy diferente a lo que pensaba y fue muy duro ver morir a amigos, estábamos más cerca de la muerte que de la vida", contó el ex boxeador que poco antes de viajar a Malvinas se enteró que iba a ser padre.
Sin embargo, Rubén estuvo allí como tantos otros, regresó y se dedicó de lleno a los guantes y el ring para hacer historia sin saber lo que vendría. Aunque, según declaró, el deporte de las narices chatas fue sólo una excusa al principio, ya que en la esquina de la casa de su novia había un gimnasio y él iba antes de verla. Hoy, y luego de vivir ambas experiencias es bisabuelo y disfruta de su familia en cada evento del que es partícipe. Luego de un importante recorrido como amateur y también como profesional tomó la drástica decisión de ponerle punto final a su carrera cumpliendo con una promesa personal.
Como púgil, Carballo salió campeón de varios torneos amateur a nivel local y sudamericano, ganó un Preolímpico y clasificó a los Juegos de Los Ángeles 1984. Fue el único en la historia en combatir en las Islas y luego representar al país en una Olimpíada, por lo que hoy recibe merecidos reconocimientos por todo lo logrado. "Es algo inexplicable y emotivo llegar a lo que llegué. Es un orgullo haber representado al país por segunda vez. Fue muy lindo llegar a las Olimpiadas que la vida me de esa oportunidad y años después estoy muy contento", contó el "Cata".
La vida de Rubén "Cata" Carballo en la actualidad
Como muchos boxeadores que dejan la actividad a una determinada edad y siguen ligados al boxeo, el caso del "Cata" no es una excepción. Rubén trabaja como entrenador en el Gimnasio Máster de Laferrere donde enseña justamente el deporte en el que representó a nuestro país. Además, enseña fútbol y no se olvida de todo lo que hizo para llegar lejos. Como futbolero, también espera por un noble gesto por parte de la AFA para los veteranos, como una invitación a un partido de la Selección Argentina: "Sería un muy lindo reconocimiento", aseguró.
Hoy, domingo 2 de abril y luego de la vigilia en San Andrés de Giles junto a sus compañeros a 41 años de la fecha inolvidable para todo el pueblo argentino, los recuerda con cariño y también con un mensaje contundente: "No me gusta mucho que digan los 'Chicos de Malvinas'. Agarramos armas, defendimos a nuestra patria y siendo hombres. Ahora somos los pibes, pero tenemos 60 años. A veces la gente no lo entiende".
El mensaje de Rubén Carballo para las generaciones venideras
Uno de los reconocimientos que recibió en esta jornada fue la invitación especial al Cenard junto a los jóvenes boxeadores que están cada vez más cerca de meterse en los Juegos Olímpicos de París 2024 y le transmitió un emotivo mensaje: "Les expliqué que es algo muy lindo representar al país de esta manera, que no hay en la vida algo más lindo que eso, hay que ponerle ganas y salir adelante en todo", sentenció el "Cata".