Mauro Icardi sorprendió a todo Boca y a Juan Román Riquelme desde Turquía, mientras recibía un premio por su última gran temporada con la camiseta de Galatasaray. En pleno evento oficial, el delantero argentino de 31 años se acordó del presidente y máximo ídolo del club de La Ribera en Europa, donde es una de las figuras del equipo turco.
El rosarino abandonó PSG de Francia en 2022 por la falta de continuidad y pasó a préstamo a Galatasaray, donde brilló a puro gol y asistencia. Por lo tanto, la mencionada institución hizo uso la opción de compra y pagó por él diez millones de euros por la totalidad del pase en 2023. Ya consolidado como titular en el cuadro dirigido por Okan Buruk, el ex Selección Argentina es destacado por los compañeros, los entrenadores y la prensa de aquel país.
Guiño para Boca: Icardi reveló que festeja sus goles con el Topo Gigio como "hizo Riquelme"
Apenas fue distinguido en la gala por su notable tarea en Turquía, el ex Sampdoria e Inter de Italia reconoció con relación a los festejos de sus tantos: “Mi celebración de gol la hizo el futbolista argentino Riquelme". Acerca de los motivos por los que hace el gesto con sus manos sobre los oídos, completó: "También hice esta celebración para escuchar cómo la gente gritaba después de mi primer gol como jugador profesional. Y todavía la sigo haciendo...”.
Los números de Icardi en Galatasaray de Turquía
- 70 partidos oficiales desde 2022.
- 53 goles.
- 20 asistencias.
- 2 campeonatos conseguidos.
Cómo nació el Topo Gigio de Riquelme a Mauricio Macri en Boca
El 8 de abril de 2001, el exenganche del "Xeneize" le hizo un gol a River en el Superclásico en La Bombonera y se lo dedicó al entonces Presidente del club, con el ya famoso gesto del programa de televisión infantil de aquella época. El titular del "Xeneize" estaba en el palco y simplemente se limitó a sonreír junto a sus allegados que lo rodeaban y a mirar la repetición por la televisión.
En el marco de la fecha 10 del Torneo Clausura de aquel año, elenco local se quedó con la victoria por 3-0 y, a los 72 minutos, el crack aprovechó el rebote del penal que le atajó Franco Costanzo para decretar el 2-0 parcial e inmediatamente dirigirse hacia el sector en el que estaba Macri. Allí, entonces, se paró, se llevó las manos detrás de las orejas y miró fijamente hacia el palco con el rostro serio durante varios segundos, como demostración de que algo no le gustaba.
Astuto, una vez culminado el encuentro en el que Boca aplastó a River, Riquelme fue consultado por el periodista Miguel Ángel "Tití" Fernández en pleno campo de juego por la peculiar celebración y, fiel a su estilo, se limitó a decir irónicamente: "No fue nada especial, solamente que a mi hija (Florencia) le gusta el Topo Gigio y nada más". La verdadera razón era que el "10" era la figura del equipo multicampeón de Carlos Bianchi, pero la dirigencia no quería pagarle un contrato acorde a ello y tampoco dejarlo salir a Barcelona en el inminente mercado de pases de junio. La situación que fue acrecentando la molestia del ídolo, que de hecho estalló en ese momento. De cualquier manera, una temporada más tarde, "el Torero" fue finalmente transferido a la institución catalana por alrededor de 15 millones de euros.