El actual vicepresidente de Boca Juniors Juan Román Riquelme y el expresidente del "Xeneize" Daniel Angelici están enemistados desde la época que el exenganche era futbolista. Ayer se reencontraron en una cena homenaje organizada en Conmebol por el sexto aniversario de la presidencia de Alejandro Domínguez al frente de ese organismo. Los dos se vieron sorprendidos por estar compartiendo el mismo espacio y sucedió una incómoda situación.
La elección presidencial en Boca de 2019 terminó de romper el vínculo entre Riquelme y Angelici, quienes desde aquel entonces se tiraron dardos mediáticamente cada vez que pudieron. Por eso el cruce en la sede de la entidad madre del fútbol sudamericano, en Paraguay, generó intriga sobre cómo iban a reaccionar.
Román se dio cuenta de casualidad de la presencia de Angelici. El entrenador colombiano Francisco "Pacho" Maturana se acercó a saludarlo y cuando el ex 10 levantó la cabeza, vio que en la misma mesa que "Pacho" estaba quien fuera presidente de Boca entre 2011 y 2019, junto a su hijo. Entonces, el ídolo "Xeneize" le extendió la mano para saludarlo por cortesía y Angelici lo dejó pagando, negándole el saludo, según informó TyC Sports, por testigos presentes en la velada.
El momento fue tan incómodo que tuvo que interceder el expresidente de Bolivia Evo Morales, que estaba presente en la cena y se llevó al vicepresidente de Boca para otro lado para evitar una pelea en un clima de festejo. Riquelme compartió la mesa con el el actual presidente de River, Jorge Brito, y el exdelantero del "Millonario" Fernando Cavenaghi.
Román viajó a Asunción en calidad de dirigente del club de la Ribera en compañía del secretario general, Ricardo Rosica; mientras que Angelici estuvo presente por su amistad personal con Domínguez. La relación entre ambos es conflictiva desde la época que Danie,l como tesorero de Boca, no quiso formar el contrato de Riquelme.
Las elecciones que la lista Ameal-Riquelme le ganaron al candidato de Angelici, Christian Gribaudo, potenciaron los cruces. El exenganche en un partido en cancha de Boca, en plena campaña, ha llegado a poner en duda la condición como hinchas del "Xeneize" del oficialismo, por no dejar entrar a la gente con caretas con su cara y tirarlas al piso.
El "Tano" en una de sus últimas declaraciones públicas se ocupó de marcar la falta de capacidad de Román para ser dirigente del club. "Ser el mayor ídolo del club no te habilita a administrarlo, te tenés que preparar y lleva años. Haber jugado bien al fútbol no te habilita a ser buen dirigente". Además agregó que el día que ganó Ameal, lo llamó y no lo atendió.
Riquelme cuando Boca ganó la Copa Argentina, sin nombrar ni a Angelici ni a Mauricio Macri, los incluyó en la dedicatoria del título. "Vamos a estar un montón de años. Los otros ya estuvieron 20 años y ya usaron al club para lo que lo querían hacer. Yo soy hincha de Boca, bostero a muerte, desde chico. Yo no soy hincha de un partido político", expresó.