La nueva serie de Netflix sobre Ayrton Senna permite revivir la trayectoria de uno de los pilotos más carismáticos de la Fórmula 1. Durante su década en la máxima categoría del automovilismo, el brasileño dejó su huella en cuatro escuderías diferentes, cada una representando una etapa distinta de su legendaria carrera.
Su paso por los diferentes equipos refleja una evolución constante que lo llevó desde sus modestos inicios hasta convertirse en uno de los pilotos más dominantes de su época. Cada cambio de escudería marcó un nuevo capítulo en la construcción de su legado deportivo.
Los inicios de Senna en la Fórmula 1
El debut de Senna en la Fórmula 1 se produjo en 1984 con Toleman, una escudería modesta que le dio su primera oportunidad en la máxima categoría. A pesar de las limitaciones del monoplaza, el brasileño mostró destellos de su extraordinario talento, especialmente en condiciones climáticas adversas.
Su actuación más destacada con Toleman llegó en el Gran Premio de Mónaco de 1984, donde bajo una intensa lluvia, protagonizó una remontada memorable hasta alcanzar el segundo puesto. Esta carrera marcó un antes y un después en su carrera, demostrando que podía brillar incluso con un auto inferior.
Su talento no pasó desapercibido y en 1985 dio el salto a Lotus, una escudería con mayor tradición y recursos. Durante tres temporadas con el equipo británico, Senna consiguió sus primeras victorias en la Fórmula 1 y comenzó a construir su reputación como un especialista en clasificación. Con Lotus, el brasileño logró seis victorias y dieciséis pole positions, incluyendo su primer triunfo en el Gran Premio de Portugal de 1985. Este período sirvió como trampolín para su posterior llegada a McLaren, donde alcanzaría la cima de su carrera.
El inolvidable paso de Senna por McLaren y su llegada a Williams
La etapa más exitosa de Senna comenzó en 1988 cuando se unió a McLaren, equipo que dominaba la Fórmula 1 en ese momento. Su llegada coincidió con una de las épocas doradas de la escudería británica, potenciada por los motores Honda y una estructura técnica de primer nivel.
Durante sus seis temporadas en McLaren, Senna alcanzó números extraordinarios: tres campeonatos mundiales (1988, 1990 y 1991), 35 victorias y numerosos récords que lo consolidaron como uno de los pilotos más exitosos de la historia. Su rivalidad con Alain Prost, su compañero de equipo, definió una era en la Fórmula 1.
El primer título llegó en su temporada debut con McLaren, en 1988, donde junto a Prost formaron una de las duplas más dominantes en la historia de la categoría. El segundo campeonato lo obtendría en 1990, en medio de una controversial definición con Prost, ya en Ferrari, mientras que el tercero llegaría en 1991.
Sus últimas dos temporadas en McLaren, 1992 y 1993, estuvieron marcadas por la superioridad técnica de Williams. A pesar de contar con un auto menos competitivo, Senna logró mantener su nivel de excelencia, consiguiendo victorias memorables como la del Gran Premio de Europa de 1993 en Donington Park.
Para 1994, Senna decidió aceptar el desafío de Williams, el equipo más competitivo del momento. Sin embargo, su paso por la escudería británica sería trágicamente breve. En su tercera carrera con el equipo, durante el Gran Premio de San Marino en Imola, un fatal accidente en la curva Tamburello puso fin a la vida de uno de los pilotos más brillantes que ha dado el automovilismo mundial.
Cerrar sesión