El arranque de la nueva temporada de la Fórmula 1 no fue muy generoso con los rookies, con la excepción de Andrea Kimi Antonelli, que terminó cuarto en el Gran Premio de Australia detrás de su compañero, George Russell. Por fuera del piloto de Mercedes, la mayoría de los jóvenes no la pasaron bien en el Circuito de Albert Park, donde todos tuvieron algún tipo de incidente durante el transcurso del fin de semana.
Oliver Bearman apenas pudo correr en las prácticas libres tras chochar el Haas en la FP1, mientras que Jack Doohan, Gabriel Bortoleto y Liam Lawson no pudieron terminar la carrera. Pero el que se llevó la peor parte de la primera fecha del campeonato fue Isack Hadjar, el francés que debía haber disputado su primer Gran Premio de la F1 en Australia, pero que ni siquiera llegó a posicionarse en la grilla de partida tras haber chocado en la vuelta de preparación.
El piloto de Racing Bulls estrelló su VCARB 02 antes de la largada y se quedó afuera de la carrera antes del comienzo, lo que le hizo romper en llanto ante las cámaras y ganarse el consuelo de varios de los presentes en el paddock, entre ellos el padre de Lewis Hamilton. Con su debut arruinado y sus apenas 20 años, era una reacción esperable, pero generó opiniones divididas en Red Bull y abrió un nuevo capítulo de discordia entre sus máximos exponentes.
Y es que tras la carrera, Helmut Marko se mostró molesto con el llanto de Hadjar, algo que hizo notar en sus declaraciones a la prensa. “Isack Hadjar lloró un poco luego de su accidente. Eso fue un tanto vergonzoso”, afirmó el asesor de Red Bull, algo que no parece haberle gustado a Christian Horner, quien se mostró mucho más comprensivo con el difícil momento que atravesó el joven piloto.
“Fue un tanto conmovedor verlo así. Ya sabes, es su primer Gran Premio”, dijo el director de la escudería austriaca, que destacó el buen trabajo de Hadjar durante los días anteriores y aprovechó para lanzarle un dardo a Marko. “Rindió muy bien en las prácticas y en clasificación. Uno se olvida que estos tipos realmente son solo unos niños”, agregó Horner, que aseguró que todavía le espera un brillante futuro al francés.
La abismal diferencia en Red Bull
El inicio del campeonato de Fórmula 1 permitió medir la diferencia que tuvieron los pilotos de un mismo equipo en el Gran Premio de Australia, con la excepción de aquellos que no llegaron a completar una vuelta. En el caso de Red Bull, Max Verstappen fue 1.750 segundos más rápido que Liam Lawson, según el informe presentado por Delta Data, lo que evidencia la falta de ritmo del piloto neozelandés, que para colmo chocó el RB21 en la etapa final de la carrera.
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