Los jugadores de la Selección Argentina ya se encuentran rumbo a sus distintos destinos tras una caravana de casi cinco horas por Buenos Aires. Sin embargo la fiesta por la obtención del Mundial de Qatar 2022 continuó en las calles a puro baile y canciones. Una "fiesta popular", como lo definieron en el Gobierno, obligó a interrumpir el recorrido en caravana que estaba previsto, por lo que los protagonistas tuvieron que ser trasladados en helicópteros para hacer "la vuelta olímpica por el aire" y luego regresar a Ezeiza.
Fue siendo una jornada histórica. El 20 de noviembre de 2022 quedará, probablemente, como el día del festejo popular más importante de nuestra historia. Las casi cinco de millones de personas que salieron a autopistas y calles a celebrar con los jugadores hicieron temblar cada rincón de la capital argentina.
La caravana, que comenzó cerca de las 11.30 desde el predio de la Asociación del Fútbol Argentino en Ezeiza, terminó luego de un trayecto de casi cinco horas, aunque sin poder lograr el objetivo del recorrido. Es que los fanáticos del seleccionado salieron de manera masiva a festejar y, ya a la salida de la concentración, el micro que trasladaba a los jugadores tuvo inconvenientes para poder acelerar la marcha. Y así sería durante las siguientes horas.
El amontonamiento de las miles y miles de personas en la autopista Ricchieri y General Paz obligó a los organismos de seguridad a cancelar el camino hacia el Obelisco y a otros puntos de la Ciudad de Buenos Aires. El nuevo plan fue rescatar a los jugadores y cuerpo técnico en la Escuela de Cadetes de la Policía Federal, en el barrio porteño de Villa Lugano, a través de cinco helicópteros, ya que todas las autopistas estaban cerradas para el imposible paso de vehículos.
En el viaje hacia el predio de la AFA, los helicópteros recorrieron parte de la 9 de Julio para que los jugadores pudieran observar la inmensa cantidad de gente que se reunió allí para esperarlos. Incluso varios de ellos subieron videos a sus redes sociales durante el viaje en helicóptero hacia la concentración.
Ya de regreso en la concentración de Ezeiza, los jugadores recogieron sus pertenencias y partieron rumbo a sus distintos hogares. En las próximas horas la mayoría se tomará un descanso convenido de antemano con sus clubes y regresarán luego de pasar las fiestas con su familia.
Si bien muchos hinchas esperaron hasta último momento en Ciudad de Buenos Aires para poder cruzarse con el micro, distintos lugares continuaron plagados de gente. El Obelisco, incluso, lugar neurálgico de celebraciones, siguió siendo el principal foco de festejos de miles de hinchas a pesar de estar anoticiados que los jugadores ya se encuentran rumbo a sus hogares.
Por la tarde, el gobierno porteño había iniciado un operativo de limpieza y reacondicionamiento de las calles de la Ciudad, en momentos en que empezaban a desconcentrarse las miles de personas que colmaron el microcentro porteño y sus alrededores.