El Club Atlético Vélez Sarsfield tomó la decisión de rescindirle el contrato a los jugadores Abiel Osorio, José Florentin y Braian Cufré que están en prisión domiciliaria luego de haber sido denunciados por abuso sexual.
Con respecto a esta situación, ahora el conjunto de Liniers adoptó la medida "luego de una investigación interna, mediante un sumario administrativo, que determinó que los referidos jugadores incurrieron en inconductas laborales graves, lo que fundamenta la rescisión con causa de sus vínculos contractuales".
En este sentido, "las áreas de Fútbol, Géneros y Legales del Club, entre otras, han trabajado de manera permanente y coordinada con el objeto de atender la situación con la seriedad que merece, cumpliendo con todos los pasos correspondientes y tomando todas las medidas necesarias para salvaguardar y proteger los intereses de la Institución".
Días atrás, frente a la misma causa, el "Fortín" había decidido rescindirle el contrato al arquero uruguayo Sebastián Sosa; imputado en la causa como "partícipe necesario", hoy en libertad condicional por haber pagado una fianza de 50 millones de pesos. "En el día de la fecha se firmó la desvinculación del jugador Sebastián Sosa del Club Atlético Vélez Sarsfield. La rescisión del contrato es con efecto inmediato y sin más obligaciones para ninguna de las dos partes", se lee en el mensaje publicado por la cuenta oficial del club en X (ex Twitter).
Con respecto a la continuidad de la causa, se confirmó a través de un informe de los peritos que acompañan a la Fiscalía de Delitos Fiscales, el hallazgo positivo de semen, saliva y sangre (junto a otros rasgos genéticos) en la habitación del hotel donde presuntamente ocurrió el hecho en perjuicio de la joven de 24 años.
Mientras tanto, ante la apelación de los imputados -Abiel Osorio, Braian Cufré y José Florentín, que aguardan por avances en el proceso cumpliendo prisión domiciliaria en un country ubicado en la provincia tucumana- la Corte Suprema provincia debe definir si avanza o no en la acusación. En el caso de la primera, deberán ser juzgados en un juicio oral.
A partir de ahora, se establecerá un cotejo de ADN con el de todos los imputados en los próximos días. Entre las pruebas destacadas en el informe, se detallan: manchas pardo rojizas en un cubre colchón -presencia de sangre no-menstrual, que coincide con el relato de la víctima en su declaración y también por lo relatado por la abogada, quien aseguró que quedó "ensangrentada" por la agresión- y la presencia de fluidos biológicos en una frazada de microfibra de color marrón.