Las entradas para los Juegos Olímpicos de Invierno, que comienzan el 4 de febrero, se distribuirán a grupos "específicos" de personas y se venderán al público general, dijo el lunes el comité organizador, en el más reciente revés asestado a la competencia por el COVID-19.
Los organizadores habían dicho en septiembre que no habría espectadores internacionales en los Juegos, bajo las políticas de prevención del COVID-19 que casi han cerrado las fronteras de China a los visitantes extranjeros.
Citó la "grave y compleja" situación del COVID-19 y la necesidad de proteger la seguridad del personal olímpico y los espectadores en su anuncio del lunes.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Los espectadores locales que reciban boletos deben cumplir estrictas medidas de prevención del COVID-19 antes, durante y después de asistir a eventos olímpicos, dijo el comité. No entregó más detalles ni especificó cómo se distribuirían las entradas.
China, que ha logrado frenar las infecciones locales de COVID-19, busca prevenir la propagación de brotes dispersos de la contagiosa variante ómicron en momentos en que comienza el ajetreado período de viajes del Año Nuevo Lunar.
Los Juegos, que se realizarán en la capital china y en la vecina provincia de Hebei, se realizarán en un "círculo cerrado" que mantendrá a los atletas y al personal olímpico separado del público general chino. La mayoría de los participantes llegarán en vuelos chárteres especiales.
El mes pasado, la Liga Nacional de Hockey de América del Norte dijo que sus jugadores no participarían en el torneo olímpico en Pekín debido a que el COVID-19 había causado interrupciones en el calendario de la liga.
Con información de Reuters