Jig, bailecito para nada, obra teatral cordobesa escrita y protagonizada por Guillermo Vanadía, vuelve a presentarse en Buenos Aires con una función especial en el marco del Festival Monserrat Festeja el Teatro. El unipersonal inspirado en William Shakespeare y la relación con sus clowns en contextos de guerra y la obsesión de los cementerios y las tumbas del universo de la escritora Mariana Enríquez tendrá lugar en la mítica sala porteña Silencio de Negras.
Como parte de las propuestas que integran el Festival Monserrat Festeja el Teatro, Jig, bailecito para nada vuelve con una función el próximo sábado 18 de noviembre a las 21 horas en la sala ubicada en Luis Sáenz Peña 663. Un comunicado revela que la obra reúne diferentes lenguajes de las artes escénicas para contar una historia que, tal vez, no llegue a ningún lado. Clown, mimo, la destreza física y absurdo interrumpen la escena y son parte de este “JIG”
"Alguien camina sobre lo que tenés muerto. Un vagabundo, cansado del supuesto circo moderno entierra a sus hermanxs que alguna vez vio actuar. Restos Isabelinos, sepulturerxs de Monrovia, ríos de Caronte, pasajes, umbrales que se juegan esta noche... El azar es otro rincón en la salida que patina. El territorio, un patriotismo baratísimo. Sabores turbios con pesto refrescante", suma el comunicado dirigido a la prensa.
La génesis de la obra fue a partir del encuentro entre Gastón Casabella, codirector, y Vanadía, quienes idearon la obra de gran repercusión en Córdoba. "Nos cruzamos en talleres que yo estaba dictando en otro país, Casabella participó, compartimos obras y opiniones y allí surgió la propuesta de que dirija JIG”, indicó Casabella en declaraciones recogidas del diario.ar. Las entradas pueden adquirirse en boletería o vía Alternativa Teatral, con abonos solidarios desde $500 dado que es una función de teatro a la gorra.
Sobre Guillermo Vanadía
Guillermo Vanadía es actor, comediante gestual y profesor en Artes Teatrales de la Universidad Provincial de Córdoba, Argentina. Se especializa en el teatro del mimo y la comedia física. Rescata y enciende el humor a través de gestos y sonidos, combinando técnicas como la del payaso y el slapticks. Disfruta actuar en el escenario de los bares, la calle, en el circo y el teatro. Sus trabajos se caracterizan par unir "esos" mundos cotidianos con la potencia del movimiento.
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