Dennis Smith, uno de los artistas más destacados del teatro musical argentino, vuelve a los escenarios con Las algas, una obra que propone un recorrido experimental por la obra de Alfonsina Storni a partir de una serie de encuentros reales y desafortunados del autor con una reconocida actriz de telenovelas que brilló gracias a Alberto Migré (no se puede revelar el nombre, aunque no es muy difícil sacarlo con las pistas que se deslizan en el espectáculo). En diálogo con El Destape, Smith profundiza en los aspectos que más le interesaron sobre la poetisa, en su dificultad para conectar con el género y adelanta detalles sobre la película en la que dirigió a Juana Viale, a quien calificó como "extraordinaria".
- ¿Cómo aparece esta famosa actriz para pedirte hacer una obra sobre Alfonsina Storni?
En 2017, ella vino a una función de Christiane. Un Bio-musical científico, obra que dirigí sobre la extraordinaria abuela de la actriz Belén Pasqualini. Y resultó que fue al teatro porque era amiga de Christiane, la vio y quedó encantada. Ahí quedamos con muy buena onda hasta que me propuso que hagamos una obra sobre su vida. Después hubo una cantidad de problemas que surgieron y dificultaron el proyecto: sucede que cuando uno empieza a excavar sobre su propia historia familiar surgen cosas que quizás no son tan geniales, sino que están marcadas por la tragedia.
Pasaron varios meses y mientras estaba de vacaciones, volvió a contactarse conmigo para decirme que quería hacer una comedia sobre Alfonsina Storni. Resulta que había leído una nota de Dany Mañas (La Nación) sobre Alfonsina y estaba entusiasmada con su historia. Me encantó la idea disparatada y la posibilidad de trabajar con ella, que es una actriz extraordinaria, aunque luego de separarnos seguí con la obra por mi cuenta.
- ¿Ella está al tanto del estreno?
Creo que sí. Igual, desde el momento en que decidimos no hacer la obra juntos quedó todo muy claro.
- ¿Qué aspectos de la vida de Alfonsina Storni fueron los que más te llamaron la atención?
Hasta leer la nota de Dany (Mañas) tenía todos los prejuicios sobre Alfonsina Storni, luego empecé a interesarme más en su historia. La conexión más interesante que logré establecer con ella gira en torno al trabajo: hay una fantasía muy idealizada de que los artistas son o bohemios arrastrados o millonarios que viven en la pavada, y no es nada así. Hay una frase de ella que es hermosa, sobre su primer libro de versos, que dice ‘lo escribí para no morir’. La existencia del artista algo tiene que ver con eso. Por supuesto, vivimos en un mundo tan industrializado y capitalista que cuando entramos en un sistema de producción hay que tener mucho cuidado para que el oficio no se convierta en una costumbre. Siento que ese aspecto de su historia de trabajo me atrajo mucho más que su poesía, género sobre el cual no me siento capacitado para opinar.
- ¿No te gusta la poesía?
No soy consumidor de poesía. Es contradictorio porque me encanta cantar y las canciones son poesía. Me cuesta entrar en la lectura de poesías, hay una dimensión de lo poético que me cuesta y no me resulta fácil alcanzar la emoción. Algo similar me sucede con la pintura.
- ¿Sentís que el biodrama teatral es un género poco explorado en Argentina?
El género lo inventó supuestamente Vivi Tellas aunque en Alemania ya lo estaba haciendo Stefan Kaegi. En mi caso lo empecé a transitar de muy chico, sin saber de la existencia de Vivi y casi de manera inconsciente. El desafío del género es trascender el factor morbo en la historia que quieras contar, algo que no siempre pasa ya que muchos buscan únicamente pseudo validación. Siento que por eso puede dar la sensación de que no esté tan explorado, porque no son muchas las obras que alcanzan la trascendencia. Te confío que estoy empezando a hartarme un poco del biodrama, desde 2007 que hago esto, ya son 16 años y no sé si me interesa tanto seguir así.
- ¿Y qué te interesaría hacer ahora?
Estoy en un momento de gran signo de pregunta. No sé qué quiero hacer. El año pasado cumplí 30 años de vivir como artista y estoy muy reflexivo. Siempre fui sincero conmigo mismo en torno a lo que quiero hacer. Capaz que porque sufrí bullying en la adolescencia, soy muy cuidadoso de no exponerme en lugares donde no quiero y donde pueda ser blanco de ataques, burlas y cosas feas.
Crecí siendo un cantante gay en los ‘90, con una homofobia espantosa en el medio. No salí del closet hasta los 23 años, el mundo era muy hostil cuando era adolescente. Ahora que tengo 42 años miro hacia atrás y repaso todas las cosas que pude hacer y no hice por la violencia de las propuestas. Recuerdo que a los 25 años hice un programa con Nicolás Repetto, donde era el cantante. Tenía mucho pánico. Por suerte el programa fue un fracaso, como todo lo que hizo Repetto en la década del 2000. Él era una radiografía perfecta del humor agresivo de los ‘90, no causa gracia y es berreta.
- Leí que vas a dirigir a Juana Viale en una película.
Es la mejor actuación de Juanita de su vida.
- Pero ella no se destaca justamente por su expresividad en escena.
¡Es recontra expresiva! Es una persona muy trabajadora, está todo el tiempo haciendo bromas y es una excelente compañera. La película se llama Virgen rosa cuenta la historia de tres hermanos que van caminando a Luján a pedir por el padre y a festejar el cumpleaños de la más chica. Y sucede todo dentro de una fábrica abandonada.
Se van a sorprender con Juana en esta película. Siempre la ubican en roles de femme fatale y hasta ahora tuvo la oportunidad de explorar su faceta humorística, que es extraordinaria y muy socarrona. Tiene una mirada sobre las cosas muy chistosa y no le molesta atravesar el ridículo. Creo que por el hecho de ser ‘la nieta de’ mucha gente le tiene antipatía pero me parece que es una pena porque se pierden la oportunidad de ver otros rasgos de su actuación.
- Las algas. Nuestra opinión: Muy buena. Elenco: Lourdes Invierno, Dennis Smith, Fernando Losada. Funciones: sábados 20 horas en El Camarín de las Musas (Mario Bravo 960, CABA). Entradas en venta en Alternativa Teatral.