Cazzu pasa del dolor profundo al empoderamiento. Dos sensaciones que la describen en un 100%, tanto a ella como a su repertorio musical. Este jueves 29 de septiembre hizo su show en el Luna Park, completamente sold out para más de 8 mil personas, y fue trasladando a su público por los distintos momentos de su ya robusta carrera artística que comenzó en 2017, siendo pionera de lo que hoy es la escena urbana argentina.
La estética de Cazzu tuvo un giro 360° con su último álbum "Nena Trampa" lanzado este año, en donde predomina el color negro, las arañas, las armas y los vidrios rotos, en contraposición a la estética más "aniñada" y emo girl de su anterior trabajo discográfico, "Error 93". Según ella, su último proyecto tiene "la intención de reavivar el trap en un momento en el que se ve eclipsado por el reggaeton". El Luna respetó el estilo "Nena Trampa": hubo sonidos de tiros antes de comenzar el show, ocho músicos en vivo, las bailarinas sostuvieron sus armas blancas todo el tiempo y las visuales oscuras acompañaron perfectamente la performance.
El público fue protagonista del recital, con cantos eufóricos, gritos y aplausos de principio a fin. Las canciones más recientes de la artista jujeña eran recibidas incluso con más efusividad que los ya conocidos hits como Loca o Maldades. Ahí se notó el respeto a los cambios que tuvo la artista a través del tiempo.
El show de Cazzu es el soundtrack perfecto para quienes tienen el corazón roto. Es de las artistas locales que mejor logra transmitir la sensación de dolor por un amor no correspondido y la bronca por no conseguir lo que quiere. Bien se vio reflejado en la seguidilla "sad" que hizo con: Miedo + Romance, Mentiste y sus especiales C14torce 1 y 2. Las lágrimas no faltaron en el público (y los desmayos tampoco).
Esa bronca y enojo Cazzu la sabe transformar en empoderamiento, fuerza y autoestima alto en cuestión de segundos, en temas como Chapiadora, Bounce o Nena Trampa. "Está hablando la jefa asi que se callan", lanzó en uno de esos momentos de power.
La cantante dejó en claro que significaba un show sumamente especial, en medio del "Nena Trampa Tour", que la llevará por varias ciudades de Argentina y también México y Uruguay. Se mantuvo bastante desaparecida de las redes sociales y cada tanto publicaba alguna fotografía ensayando con su banda y bailarines que la acompañaron. "Trabajamos muchísimo para que tengan una experiencia hermosa", admitió horas antes del recital.
Cazzu se mostró muy cálida y cercana con el público, y también preocupada por quienes se descomponían en las primeras filas del show. En el escenario, no desaprovechó la oportunidad de agradecerles por acompañarla en todo su camino artístico con tanta pasión. Les dijo que ella sabía que asistir a un evento tenía sus dificultades, tanto económicas como logísticas, y que, cuando ella era chica, no pudo ver a Linkin Park-banda que amaba-por no tener plata. Por este motivo, mandó un saludo especial para todos sus fans que no pudieron asistir esa noche.
Hubo dos dedicatorias: a su abuela, en la milonga Piénsame y a todas las víctimas de femicidios en Yo, yo, yo, la canción que le dedicó a Camila Tarocco, una joven de 26 años que fue encontrada asesinada dentro de una bolsa de consorcio en un descampado de Moreno a principios del 2020. "Por las que no están", se leía en las pantallas mientras Cazzu interpretaba este tema, cerca del final del concierto que culminó con el hit Maléfica (sin la presencia de María Becerra) y Los hombres no lloran.