Poseidótica llegará por primera vez al mítico Teatro de Flores y lo hará para una ocasión más que especial: será para presentar Las palabras y la realidad, su quinto álbum. En la previa, Martín Rodríguez (Cobra Rod), bajista de la banda, habló con El Destape sobre el arduo trabajo que fue la grabación de su nuevo disco con ocho ingenieros diferentes, cómo es ser una banda independiente en tiempos de crisis y la fuerza que mantienen el rock lejos de los grandes flashes.
Con casi 20 años de trayectoria, en el 2020 Poseidótica atravesó la salida de uno de sus integrantes, lo que provocó un verdadero sismo en la banda: "Primero hubo una renovación interna que fue tener, en un principio, miedo y decir 'uy, ¿qué va a pasar ahora?'. Y después fue refrescar un poco toda la energía", explicó Cobra Rod en diálogo con El Destape. En ese sentido, el bajista reconoció que surgió la necesidad de grabar un material completo con el nuevo integrante (Eugenio de Luca) para "afianzar" a la nueva formación.
En una época que se estila lanzar singles y no discos completos, ¿cómo fue la decisión de lanzar la obra entera?
- La industria valora más el single antes que el disco completo y la verdad que no se compara para nada. Pero somos muy independientes en ese sentido, no le rendimos cuentas a nadie. Y en realidad sacar singles lo hicimos porque fue de cocción lenta este disco: lo compusimos a fines del 2020, lo empezamos a grabar a mediados del 2022 y estamos en el 2024, o sea que hubo un proceso de 2 años de grabación, mezcla, posproducción.
¿Cómo es ser independiente en tiempos de crisis?
- Es difícil y cansador. Pero a la vez siempre estuvimos comprometidos con lo que pasa en el país y con la situación: por ejemplo, poner los tickets lo más barato que se pueda, ofrecer un espectáculo de mucha calidad. Te vas adaptando. Somos de girar mucho y para lograrlo nos tuvimos que adaptar. Siempre le buscamos la vuelta, obviamente ser independiente tiene mucho de sacrificio, pero también la satisfacción cuando vas logrando las cosas. También hay que separarse un poco de todo eso, porque la verdad es que a veces estás muy metido en lo que estás haciendo y perdés un poco la noción de a dónde llegaste. Hay que inspirarse también en otros que se manejan independientemente.
Cada canción de Las palabras y la realidad tiene un ingeniero distinto, ¿cómo eligieron a cada uno?
- El concepto primordial fue "queremos que sea distinto a lo anterior". ¿Cómo llegamos a eso? Bueno, busquemos un producto diferente para cada tema, lo cual fue un trabajo muy arduo, porque no fue un solo ida y vuelta, fueron ocho. Lidiamos con eso que fue medio desgastante, pero cumplimos el objetivo de que cada persona le aporte una sonoridad. También tratamos de no repetir con ingenieros que ya hayamos trabajado.
Trabajaron también con ingenieros y productores que forman parte de una nueva generación, ¿qué diferencias notaron?
- El trabajo con esta nueva generación es más dinámico en el sentido de que no hay tantos idas y vueltas. Con Estanislao López, creo que la primera mezcla ya dijimos "está buenísimo, no hay nada que retocar". Lo cual es un montón porque por lo general con otros puede haber mucho ida y vuelta. Lo que se está imponiendo también bastante ahora es el trabajo a distancia y cada uno en su estudio casero. Con el diario el lunes, me gusta más la vieja usanza: les caigo al estudio, nos sentamos adelante de la mesa de mezcla y escuchamos, y acomodamos ahí. Pero es todo un aprendizaje, a pesar de tantos años uno sigue aprendiendo los procesos. La escuela musical nunca se detiene.
¿Por qué el Teatro de Flores para presentar Las palabras y la realidad?
- Lo elegimos porque nunca habíamos tocado, presentarte en un lugar donde nunca tocaste siempre es una experiencia que te enriquece. Estamos contentos de hacerlo ahí. Si bien hablamos de la situación difícil de Argentina, no es algo nuevo para nosotros, y al mismo tiempo sabemos que acá sucede algo que en otros lados no pasa. En enero tocamos en Niceto y vino un amigo mío de Barcelona y no podía creer que había 700 personas. Y me decía "esto en Barcelona con una banda local no pasa".
Pese a que el rock ya no es mainstream, sigue habiendo una escena potente.
- Tenemos una escena muy fuerte en Argentina. A veces por ahí también estamos tan metidos en el día a día, que no legamos a valorar lo que hay, pero hay una escena pujante, bandas saliendo todo el tiempo. El que dice que el rock murió, que no hay bandas nuevas, es que realmente no las está buscando porque hay un montón. Después de la pandemia salieron un montón de banda de pibes y pibas de 20 años que la están rompiendo, también hay público joven con muchas ganas. Hay toda una efervescencia que también te contagia a decir "bueno, sigamos generando". Y vamos a hacer esto y vamos a invitar bandas nuevas para que siga girando la rueda.
Si no conocés Poseidótica, Martín Rodríguez recomienda que arranques escuchando En lo profundo.
Cómo sacar entradas para Poseidótica en el Teatro de Flores
Este sábado 10 de agosto, Poseidótica llegará por primera vez al Teatro de Flores, en donde presentará Las palabras y la realidad. IAH, Undermine y WRRN amenizarán la previa en una noche que promete ser histórica. Todavía quedan entradas para el show y las mismas pueden conseguirse a través de Passline en el siguiente link.