Con un escueto comunicado, la familia de Joey Jordison, baterista y cofundador de Slipknot, anunció la sorpresiva muerte del músico a los 46 años. El baterista había dejado la reconocida banda en el 2013 y debió superar un trastorno neurológico conocido como mielitis transversa. A pesar de este diagnóstico, la familia no informó cuáles fueron las causas que llevaron a que Jordison muriera el pasado lunes 26 de julio. Actualmente se encontraba formando parte de Sinsaenum, un supergrupo de metal extremo.
"Estamos desconsolados por compartir la noticia de que Joey, prolífico baterista, músico y artista falleció pacíficamente mientras dormía el 26 de julio de 2021", informó la familia de Joey Jordison en un comunicado enviado a Billboard. En el mismo texto, la familia detalló algunas de las características personales del baterista: "La muerte de Joey nos ha dejado con el corazón vacío y sentimientos de tristeza indescriptible. Para aquellos que conocieron a Joey, entendieron su ingenio rápido, su personalidad gentil, corazón gigante y su amor por todo lo relacionado con la familia y la música".
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De la misma manera, los allegados a Jordison pidieron a amigos, fans y medios de comunicación que respetaran la privacidad en este momento tan complicado: "La familia realizará un funeral privado y le pide a los medios y al público que respeten sus deseos". El baterista fue uno de los fundadores de la banda Slipknot y como tal siempre fue uno de los más queridos por el público de la banda.
Joey Jordison y Slipknot
En Iowa en 1995, Jordison formó Slipknot con el percusionista Shawn Crahan y el bajista Paul Gray, fallecido en el 2010 por una sobredosis accidental. Desde su formación, el baterista fue una pata fundamental del grupo que se hizo famoso no solo por su metal alternativo sino también por las espeluznantes máscaras de sus integrantes. En diciembre del 2013, Slipknot anunció que se estaba "separando" de Jordison, algo que el propio músico negó posteriormente y aseguró que lo habían despedido.
En una entrevista realizada en el 2016, el baterista reveló que su despido coincidió con el diagnóstico por parte de los médicos de que sufría de mielitis transversa, un enfermedad neurológica por la que ambos lados de una sección de la médula espinal se inflaman. Jordison aseguró haber "perdido" las piernas en ese momento y consideró que sus ex compañeros confundieron su enfermedad con un problema de abuso de sustancias, algo que el propio músico reconoció también que sufrió.
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