Este jueves 8 de agosto, Niceto Club volverá a convertirse en el escenario del tercer show de Indios, con un concierto que marca el retorno de la banda después de una pausa de cuatro años. Este emocionante reencuentro promete una noche llena de energía, nostalgia y nuevos sonidos que vienen gestándose para lo que será un próximo disco.
En diálogo con El Destape, Joaquín Vitola, frontman de la banda, habló sobre los desafíos y expectativas de este regreso y dio detalles de lo que se viene en esta renovada etapa del grupo de indie pop rosarino que se convirtió en una de las bandas más queridas de la escena musical.
¿Cómo vivieron el regreso de Indios en los dos Nicetos que hicieron?
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- Nos sorprendió mucho escuchar canciones que no estábamos acostumbrados a oír coreando o incluso pogueadas por la gente. Había una energía muy poderosa, espectacular. Hay mucho público nuevo que se acercó a nuestra música en este tiempo que estuvimos ausentes. Es loco eso de que por ahí no pasó tanto tiempo, pero relativamente sí. Porque siento que en realidad no es el tiempo, sino las cosas que vivimos. Del 2020 al 2024 fueron cuatro años donde pasó de todo. La música se volcó mucho más al streaming y a las plataformas. Siento que eso también trajo una mayor posibilidad de escuchar, de encontrar música nueva. Con nosotros pasó, de hecho, por hablarte de los números, que hubo una mayor cantidad de gente que nos escuchaba en Spotify a pesar de no sacar nada nuevo, también nuestra canción Tu geografía revivió en TikTok, pese a que nosotros no teníamos un perfil en esa plataforma... Entonces, al momento de decir "estamos listos para volver a la acción y demás", no sabíamos si toda esa gente se volcaría. Una cosa es escuchar en tu casa y otra cosa es ir a ver el show. Así que toda esa información nos daba un poco de nervio, a ver si funcionaba o no en vivo, y creo que fue un bonito momento.
Cómo fue cuando se plantearon volver, porque también cada uno estaba con sus proyectos solistas, haciendo otras cosas...
- Exacto, sí. Pato, nuestro tecladista, estuvo unos años viviendo en Oslo, Noruega, por ejemplo. Y el resto estaba volcado a proyectos individuales. La verdad que todos teníamos ganas. Cada uno internamente empezó a ordenar un poquito sus mundos, pero creo que fue muy orgánico y había muchas ganas de volver a encontrarnos para hacer música. Creo que nos hizo muy bien también frenar. Decimos que por ahí nos encontramos, al principio, después de muchos años y más aún, los que vivimos en Rosario, para generar y gestar todo este proyecto. Hay un momento en el que la vorágine está buenísima también. Decir "bueno, ahora vamos a hacer un disco, después vamos a hacer un show", o sea, te va llevando, y es difícil ponerle un stop y mirar para el costado. Siento que es como una dosis de silencio que al mundo cada vez le cuesta más. Todos tenemos tanto la capacidad de sonar por los medios de comunicación disponibles que el hecho de que algo haga silencio creo que ya es rupturista. Eso también nos dio la capacidad de entendernos un poco más en el vacío donde estábamos parados.
¿Qué pueden decir de la evolución de la escena nacional indie de la que ustedes también fueron parte?
- Buenísimo. Por un lado, siempre está esa cosa más narcisista, como decir "ah, quiero ser yo", y es una comparación (se ríe). Pero igual es algo súper humano, no es malo ni despectivo; me parece que está buenísimo. Tiene que ver con lo que después te da el combustible para hacer arte. Todos somos amigos, así que estamos haciendo cosas en conjunto. Hablamos de Bandalos Chinos, El Zar, Silvestre y La Naranja, son gente con la que componemos juntos normalmente. Hablando con colegas de una generación anterior, nos contaba cómo había más competitividad en su época. Hoy estamos en un momento donde está todo mucho más colectivizado, con más ganas de trabajar en conjunto. Creo que es inteligente estratégicamente para la vida porque te sentís menos solo. Al final, como vos querés llegar a la cima, eso resuelve mucho. La soledad no estimula tanto. Tener una banda es importante porque te da la fuerza del otro.
¿Cómo surgió Cristal, su nueva canción? ¿Será parte de un próximo disco?
- Cuando decidimos volver a juntarnos, no fue tan como "bueno, hagamos esto". Fue natural. Juntarnos a componer, hicimos campamentos de composición con amigos como Facu de El Zar y otros músicos, como Fran de Francisca y los Exploradores. Hicimos dos campamentos, y en esos espacios surgió Cristal. También escribimos canciones en la ciudad y en nuestras casas. Empezamos con música nueva y Cristal es la piedra iniciática de este nuevo comienzo. La idea es sacar un disco. Vamos a sacar una canción ahora, en este mes o en el que viene. Hicimos una grabación con Nico Cotton y Mateo Rodó, que produjeron a Indios en esta vuelta, con cuatro canciones. Vamos a seguir grabando temas y trabajando en eso. Creo que será el año que viene, pero la banda está activa y trabajando.
-Además del Niceto que se viene, ¿qué otros proyectos tienen para lo que resta del año? ¿Van a incursionar en los featurings?
- Estamos con ganas de esto que decís: de empezar a grabar colaboraciones con amigos y demás, hemos tenido invitados en vivo, pero nunca grabamos un featuring. Así que sí, va a ser, no sé si este año, pero sí estamos con ganas de hacer alguna colaboración y seguir componiendo, seguir grabando, seguir tocando. O sea, estamos también un poco preparados para donde el destino nos lleve. Estamos realmente apuntando a que el proyecto siga potenciando lo que tiene. Queremos volver al circuito de festivales, ahora tenemos este año el Festival Bandera en Rosario y el Harlem en Santa Fe... También nos gustaría girar por Europa, que nunca lo hicimos.
¿Cómo definirías a Indios?
- Como la búsqueda constante del encuentro de la mejor canción.
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