Este jueves 28 de noviembre se confirmó la triste noticia de la muerte de Lía Crucet. La cantante de 72 años llevaba algunos días internada en un hospital de Mar del Plata por su cuadro de cáncer bronco pulmonar, donde finalmente falleció. Sin embargo, antes de que su salud se complicara, había estado activa en redes sociales interactuando con sus fanáticos.
Crucet estaba internada en un geriátrico de Mar del Plata y allí pasó sus últimos años. Es en este sitio donde recibía visitas de sus amigos o seres queridos que iban a verla en medio de su cuadro delicado de salud. Precisamente, una de las últimas personas en visitarla fue Gladys La Bomba Tucumana, una de sus grandes amigas; ese día Crucet compartió una foto en su Instagram para dejar inmortalizado el recuerdo con su colega.
La imagen se remonta a marzo de este año, precisamente fue publicada el día 30. En la misma se la ve a Lía sentada en silla de ruedas y a Gladys abrazándola por la espalda y dándole un beso en el cachete. A esta imagen solo la acompañó de un corazón en la descripción, pero eso solo bastó para que sus seguidores le comentaran celebrando la amistad y enviándole buenos deseos. Por el momento, la intérprete de La Pollera Amarilla aún no dijo nada con respecto a la muerte de su amiga.
Previo a este imagen, Lía tenía publicadas otras imágenes del 2023 hacia atrás en donde se le ve también con familiares y amigos en diversas situaciones sociales. También solía compartir algunas selfies en donde se mostraba maquillada y vestida, lo que demostraba que mantenía su esencia de siempre aún cuando estaba alejada de los escenarios.
Lía Crucet: su legado en la música y la cultura
Lía Crucet alcanzó el estrellato en los años 80 y 90 con éxitos como La güera Salomé y Que bello. Su trayectoria estuvo marcada por su capacidad para conectar con el público a través de letras y una energía contagiosa, convirtiéndose en una figura querida y admirada en todo el país. Más allá de la música, su autenticidad y perseverancia en medio de desafíos personales y de salud la convirtieron en un ejemplo de fortaleza y pasión.
La cantante no solo brilló por sus logros artísticos, sino también por su legado como referente cultural. Su estilo particular trascendió el ámbito tropical, llevando su voz y su esencia a los escenarios más importantes de Argentina. Durante sus últimos años, luchó contra problemas de salud que la mantuvieron alejada de los reflectores, pero su espíritu y su obra continuaron siendo recordados por generaciones. Hoy, al despedirla, queda el consuelo de su invaluable contribución al folklore popular y la certeza de que su música seguirá sonando en los corazones de quienes disfrutaron y celebraron su arte.