Una muestra que reúne obras de la artista Yamila Salvarreyes, quien interviene con técnicas mixtas imágenes de Eva Perón y construye retablos y estampillas para representar la simbología que rodeó su vida y trayectoria como ícono popular y revolucionario, se expone en el Museo Evita de la Ciudad de Buenos Aires.
“Bendita Eva. Fuego sagrado” es el nombre de la exhibición en la que la artista plástica platense, con técnicas de arte digital, crea dos series, una de las cuales está compuesta por seis obras: Eva paraíso, Eva galáctica, Eva da derechos, La máquina de los sueños, Patria siempre y Niños felices.
"Eva paraíso es la que imagino en el mundo de la muerte; Eva galáctica conduce a su lugar de pertenencia junto a las estrellas; Eva da derechos apunta al voto femenino; en Patria siempre, su imagen aparece rodeada de banderas, amparada por el signo la victoria; La máquina de los sueños -relacionada con todo lo que gira en nuestras vidas- está representada por una máquina de coser muy pequeña, presente en la exhibición, a la que se le aprieta un botón y empieza a coser un vestido; Niños felices evoca los juguetes obsequiados a los niños desde la Fundación Eva Perón, explica a Télam Salvarreyes.
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La otra serie, que forma parte de la muestra, se denomina Serie Inmortal, donde aparecen estampillas en tonos de rojo, azul, rosa y verde amplificadas e intervenidas y los altares y retablos que evocan la figura de Eva, inspirados en una frase que dijo antes de morir: "Me van a homenajear en lugares empobrecidos con altares improvisados", recuerda la artista, al hacer mención al retablo "Eva santa del pueblo", realizado con maderas recogidas en Berisso y Los Toldos.
"El gran retablo" que también integra la muestra, fue realizado con maderas obsequiadas a Salvarreyes por un chozno de Rosas. La obra tiene un manto de Eva intervenido con simbología japonesa y rusa, y lleva las frases Eva inmortal, Eva amada, Evita santa del pueblo; cuenta con imágenes de los descamisados, de fábricas, de La República de los Niños, de la Fundación Evita y aparece la misma Eva dándole un alimento a un niño, con la bandera argentina y las flores de no me olvides, en alusión a toda la simbología peronista.
Inspirada en Boticelli, Salvarreyes, egresada del Instituto Di Tella, también compuso altares en formato pequeño, instalados en la puerta del museo, "llenos de cristales y perlas, que tanto le gustaban a Eva, y semillas del árbol de cristal", señala la artista. "Esta obra tiene que ver con el amor que para mí significa Eva, por eso hay reverencia, veneración, rezo, desde el amor del pueblo empobrecido, del que se refunda de la nada y sale adelante", afirma.
"Mi amor por Eva y mi militancia datan de cuando era pequeña, de haber visto en mis bisabuelos, en mis abuelos y en mi padre una militancia amorosa. Ellos eran turcos que se instalaron en el barrio platense El Mondongo, donde están las universidades y el Conicet y allí realizaron su labor militante", dice la artista de 44 años, que explica que su bisabuelo había construido un mimeógrafo -que también se expone en la muestra- con el que hacían afiches de Eva, que pegaban en las columnas de la ciudad, en los años de resistencia.
La muestra retoma "la sacralización de la mujer terrenal y humana devenida en un mito viviente, para simbolizar a todas las Evas que viven en cada uno de nosotros", explica el Museo Evita y precisa que la muestra podrá visitarse de martes a domingos, de 11 a 19, en la sala de exposiciones temporarias de Lafinur 2988, con entrada libre y gratuita.
Con información de Télam
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