Lo cotidiano extraordinario, una muestra de María Silvia Corcuera Terán, que reúne un centenar de obras entre pinturas, textiles y objetos con los que la artista argentina busca representar la capacidad de modificar la realidad a través del arte, se exhibe a partir de hoy en el Museo de Arte Contemporáneo de Buenos Aires (Macba).
Distinguida con el Premio Trabucco, otorgado por la Academia Nacional de Bellas Artes, la destacada artista presenta en esta exhibición 100 obras realizadas en diferentes técnicas y formatos: pinturas, esculturas, textiles y relieves, con preeminencia del objeto y el collage.
Realizadas entre principios de los años ´90 y la actualidad, los trabajos dan cuenta de la capacidad de modificar la realidad en otra cosa, reformulándola, cuestionándola y expandiéndola, por lo que la transformación en la obra se produce siempre a partir de la mirada crítica de la artista, comprometida con las vicisitudes humanas del pasado, el presente y el futuro.
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La muestra comienza con la serie Juguetes (1992-1995), que constituye un momento fundacional en su producción con características que reaparecerán una y otra vez: lo lúdico, el humor, y materiales descartados y recuperados de uso corriente o de poca valoración cultural, con un cromatismo plano y saturado de reducidas tonalidades privilegiando el rojo y el azul y una personal geometría, según la propuesta curatorial de Laura Casanovas.
Su obra propone también diálogos permanentes con otras culturas superadores de las construcciones binarias de la modernidad, advirtiendo capas de memorias, historias, encuentros y partidas, sostiene Casanovas, quien agrega que esto sucede en las series Las Rayadas (2008-2019), Dones, Randas y Cascabeles (2011-2017).
Entre los temas y motivos de sus creaciones se destacan la ciudad, sobre todo Buenos Aires, con su identidad, historia, tragedias y afectos; el barco como símbolo de migraciones forzadas e intercambios y el peinetón; mientras que en la extensa serie La Dote Argentia (2014-presente), el cuerpo se establece como motivo precioso a rescatar, proteger, reparar y en vínculo con la moda, en tanto código cultural de época. La dote deviene metáfora, además, de un país con sus avatares históricos.
En la ecuación de la artista, sin embargo, "el horizonte es utópico antes que distópico, debido a la necesidad vital de seguir creando y descubriendo lo extraordinario en lo cotidiano", señala Casanovas.
La muestra, que se desarrolla en las salas del primer piso, primer subsuelo y segundo subsuelo del museo, podrá visitarse hasta el 26 de febrero de 2023, en la porteña Avenida San Juan 328, de lunes a domingos de 12 a 19, con una entrada de $500, mientras que los miércoles es de $250.
Con información de Télam