La muerte de Marilyn Monroe es uno de los misterios más resonantes de Hollywood. Durante décadas, los artistas trataron de desentrañar la verdadera causa del deceso de la mítica estrella del cine. Ahora, un libro biográfico (escrito en 1969 pero reeditado recién en 2020) sobre la actriz sugiere que pudo haber muerto con una gran depresión, quizás causada por un aborto que se realizó semanas antes de morir.
El libro Norma Jean: The Life of Marilyn Monroe, indaga en los aspectos personales poco conocidos de la artista. El autor recolectó decenas de testimonios de personas relacionadas a ella, como el de dos de sus maridos, James E. Dougherty, y el escritor Arthur Miller, el profesor de interpretación de la actriz, Lee Strasberg o directores como Otto Preminger, John Huston y Billy Wilder. Un fragmento publicado por The Daily Beast, demuestra que la interrupción del embarazo es uno de los puntos más importantes del libro, que tiene poco más de 500 páginas.
Arthur P. Jacobs, un agente de publicidad que trabajó con la actriz, afirmó que el 20 de julio de 1962 Monroe ingresó en el Hospital Cedars of Lebanon, uno de los más prestigiosos de Los Ángeles, con un nombre falso. "El ayudante de prensa se quedó en shock. Si Marilyn estaba embarazada de verdad, su estado mental debía ser inimaginable", puede leerse en la biografía.
Fred Lawrence Guiles, el autor del libro (murió en el 2000), da a entender que el padre de ese bebé podría haber sido el entonces presidente de Estados Unidos, John Fitzgerald Kennedy, o su hermano, Robert Bobby Kennedy. "Habían pasado tres meses desde su último encuentro íntimo con el presidente Kennedy, y sólo unas semanas desde la última vez con su hermano. Habría sido fácil asumir que el bebé que abortó era un Kennedy, pero también estuvo viéndose con otros hombres en primavera y en verano", escribe.
Marilyn Monroe fue hallada muerta por su ama de llaves el 4 de agosto de 1962 y, pese a que los tanatólogos no encontraron restos de barbitúricos en su estómago "completamente vacío", a la prensa se le transmitió que la mítica actriz había ingerido cuarenta cápuslas de Nembutal, por lo que la causa del deceso fue una "sobredosis".