El reciente éxito de la miniserie de suspenso Mare of Easttown puso nuevamente en agenda mediática a Kate Winslet, prestigiosa actriz que saltó a la fama gracias al clásico de los '90 Titanic. Una de las curiosidades menos conocida de la actriz es el insólito lugar en donde guarda el Oscar que, tras cinco nominaciones, ganó en 2009 gracias a su papel en la película El lector (The Reader): El baño.
¿A qué se debe el insólito lugar? Lo tiene allí para que cualquiera que visite su casa pueda recrear la experiencia de recoger un Oscar y dar su discurso de agradecimiento ante el espejo. Winslet, que recordemos ya reveló que guardaba su premio en el cuarto de baño hace unos cuantos años, es una más del club de las oscarizadas actrices que guardan su estatuilla en el aseo. Una curiosa logia que cuenta con socias tan selectas como Jodie Foster, Emma Thompson o Susan Sarandon.
En su caso, asegura la actriz en una entrevista con el Wall Street Journal, lo ha colocado en el baño para que sus amigos e invitados puedan sentirse libres y recrear, en la intimidad que otorga el excusado, la sensación que se siente al recoger un Oscar. "Decidí ponerlo ahí para que todo el mundo pudiera cogerlo y decir ante el espejo: 'quiero darle las gracias a mi hermano y mi padre'. Y además puedo descubrir cuando alguien lo ha hecho porque tardan un poquito más en salir del baño después de que suene la cisterna. Vuelven sonrojados, es una locura", confesó en una entrevista.
Además, la protagonista de Titanic y The Holiday, entre otras, admitió que cuando ganó su Oscar, había estado practicando el discurso de aceptación desde que era una niña de 8 años de edad, ensayando en el baño con un recipiente de shampoo.
Mare of Easttown: Kate Winslet se negó a que borraran su barriga en una escena de sexo y quitaran su arrugas de carteles
Mare of Easttown, el drama policial protagonizado por Kate Winslet en HBO, el cual ha sido aplaudido también por la verdad que emana su personaje. Y es que la inspectora Sheehan es una mujer real, cuyo aspecto natural la propia actriz defendió a capa y espada, hasta el punto de que llegó a prohibir cualquier retoque digital de su cuerpo en una escena de sexo.
En una entrevista para el New York Times, la actriz reveló cómo el director de la miniserie de HBO, Craig Zobel, le aseguró que pensaba eliminar digitalmente "un trozo de barriguita abultada" de la intérprete en una escena de sexo en la que aparecía semidesnuda con Guy Pearce. Sin embargo, ella se opuso tajantemente. "¡Ni se te ocurra!", exclamó, recordando que también pidió, en dos ocasiones, eliminar cualquier retoque por PhotoShop de los carteles promocionales de la ficción. "Me decían 'Kate, en serio, no puedes', y yo les decía que sabía cuántas líneas tengo al lado de los ojos y les pedí cortésmente que me las devolviesen", detalló.