El primer encuentro del seminario "Economía de la Cultura" estuvo focalizado en el sector de videojuegos y contó con la participación de Tristán Bauer, ministro de Cultura, y Lucrecia Cardoso, secretaria de Desarrollo Cultural, mientras que también estuvieron presentes Luis Scasso, director de OEI Argentina, y Sandra Rodríguez, coordinadora de Cooperación e Innovación.
La enorme riqueza cultural que posee Iberoamérica en torno a valores, patrimonio e identidades, llama a los principales actores del ámbito digital a pensar en la cooperación en términos de derechos culturales, ciudadanía cultural e integración regional ante los nuevos escenarios. Nuevas e innovadoras formas de creación cultural y artística surgieron gracias a la revolución digital y tienen la capacidad de promover el acceso a la cultura. Por este motivo, este sector tiene un enorme potencial para promover una cultura accesible, que contribuya a democratizar su utilización y promover la participación tanto en la creación como en el uso y disfrute de la misma.
Un sector cuyo desarrollo se nutre de múltiples disciplinas y resulta estratégico en términos de innovación, transmisión de tecnología y oficios sostenibles es el de los videojuegos. En ese sentido, Argentina ofrece al mundo títulos tanto en formato de propiedades intelectuales para todas las plataformas como en el de servicio, con la transmisión de saberes y la aplicación de los videojuegos en educación, salud, recursos humanos y publicidad, entre otros. Además de ser uno de los más valorados por la experiencia, innovación y creatividad en el desarrollo, Argentina se destaca como el tercer país de consumo de videojuegos en Latinoamérica.
Debido a esto, el espacio propuesto por el seminario “Industrias creativas y culturales”, se vuelve relevante para sentar las bases de los desafíos que hay por delante, impulsado desde la región e incorporando a todos los eslabones de las cadenas de valor. Durante el encuentro, Luis Scasso sostuvo: "Nosotros somos la última generación en la historia de la humanidad que va a haber vivido un mundo analógico, no digital. Esto implica, no sólo, una responsabilidad sino también implica la capacidad de tener una mirada que a veces es estrecha y que a veces es más amplia. Si hubiéramos dicho, imaginado, sugerido que el tema de los videojuegos, que recién empezaba con el Atari, tenía que ser una responsabilidad del Ministerio de Cultura y que, es más, tenía que haber una Dirección de Videojuegos de una Secretaría de Industrias Creativas, hubiera sido algo impensado desde las concepciones que teníamos".
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Por su parte, Lucrecia Cardoso aseguró: “Estamos construyendo un futuro, que inevitablemente va a llegar, al potenciar videojuegos. Construimos en conjunto ese gran complejo exportador que es la Economía del Conocimiento, el tercer complejo exportador de la Argentina. En el 2022 generó 7.864 millones de dólares y se convierte en cifra récord frente a 6.600 que había generado en el 2021.”
Del encuentro también participaron especialistas internacionales: Marcos García Cristóbal, ex director de Media Lab Prado, y Jeff Cardenas, COO de Dreams Uncorporated. Mientras que como referentes del sector, asistieron Florencia Fole, Ezequiel Heyn y Miguel Martin de la Asociación de Desarrolladores de Videojuegos Argentinos (ADVA); Mishka Palacios De Caro y Bernardo Mallaina de la Fundación Argentina de Videojuegos (FUNDAV); María Clara Esnaola y Valeria Colombo de Women in Games.
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