La Patagonia ya tiene su propio festival ecologista de música que nada tiene que envidarle a los que llevan años instalados. En su segunda edición, el Patagonia Picnic volvió con los objetivos más claros que nunca: crear un espacio de encuentro al aire libre con música de por medio e incentivar al cuidado del medioambiente con varios proyectos sustentables para preservar el suelo barilochense. En la primera jornada de las cinco programadas, el festival que se celebra en la ciudad de Bariloche le abrió las puertas a un ciclo que cuenta con las presentaciones de artistas como El Kuelgue, Las Pelotas, Trueno y No te va a Gustar, entre otros, y emprendió un camino de ida hacia la enseñanza de medidas ecologistas.
“El objetivo primordial es dejar la mínima huella ecológica y tener un impacto positivo en nuestro público como proveedores con medidas que puedan adoptar en su vida cotidiana”, dijo Joaquín De Bento, productor general del evento sobre el principal objetivo que quieren dejar en su público. Y esta premisa ya se notó desde el primer ingreso al festival, donde aparecen, al igual que en todo el predio, tachos de basura para separar residuos, contenedores especiales para depositar las colillas de cigarrillos y bolsas de residuos atrás de los foodtrucks para que los mismos locales también incentiven al público desde el ejemplo. Además, solo se entregan vasos reutilizables en donde se sirven las bebidas en todos los stands y se pueden llevar a modo de “sourvenir”. Y, si al final del día, la persona decide devolverlo a la producción, se realiza un reintegro del dinero.
La primera jornada estuvo atravesada por una propuesta sumamente familiar, donde grandes y chicos pudieron encontrar un espacio de dispersión y llevarse un aprendizaje sobre la importancia de cuidar el medioambiente. Puestos con juegos, inflables, obras de teatro fueron los que conformaron la “Zona Kids”. Mientras tanto, los adultos contaron con stands de emprendimientos, locales de tatuajes y peluquería e incluso una zona de intervención artística para dejarse llevar. Además, también contó con música en vivo desde las 17 horas hasta la medianoche, en donde brillaron sobre el escenario artistas emergentes como Fran Lanfré, Nina Da Terra y Gusanos de Seda. Por último, el broche de oro de la primera jornada estuvo a cargo de El Kuelgue, con un espectáculo que acompañó al atardecer patagónico. Y, para cerrar el primer día de Patagonia Picnic, Las Pelotas hicieron saltar al público con sus mayores hits.
En el predio primó una energía de disfrute, reunión y consciencia. Mientras el público llegaba para acomodarse en el pasto -como un picnic- para escuchar la música en vivo, varios integrantes de la producción del festival se acercaban para profundizar en las medidas ecologistas, responder preguntas y señalizar los espacios donde tirar residuos. Y el público acató, el piso permaneció limpio durante toda la primera jornada y los tachos de basura llenos hasta el tope.
La fusión entre la música y el paisaje imponente de Bariloche ya parecen ser una mezcla inmejorable, pero el Patagonia Picnic decidió ir más allá y convertirse en el primer festival patagónico en promover buenas prácticas ambientales en los recitales llevados a cabo en enero y febrero con el fin de despertar la conciencia ambiental del público. Por este motivo, el ciclo contó investigación y una gestión específica para concretar este proyecto. “Sabemos hace tiempo que la preservación del medio ambiente es un asunto vital y ha llegado el momento de hacernos cargo”, aseguró Daniel Aldo Gómez, Biólogo, Ecólogo y Consultor encargado de la gestión ambiental del festival. “En esta edición nos propusimos, además de brindar un ambiente festivo y de buena música y compañía, promover e incorporar en el público buenas prácticas ambientales”, detalló.
A lo largo de los tres fines de semana en los que se celebrará el festival, y las cinco fechas programadas, la consciencia ecológica será el timón que guiará al ciclo. Sin embargo, la producción también asumió el desafío de ir adaptando las medidas a la temática que se celebre en cada día. Y si bien el sábado 21 tuvo una dinámica familiar, este domingo 22 de enero continúa con una jornada dedicada a la música electrónica y solo apta para mayores de edad. Pero sin importar que los músicos que convoquen el público sean diferentes, el objetivo siempre será el mismo: preservar el medioambiente.
Patagonia Picnic: el lineup de las próximas fechas
En su primera jornada, el festival ya llegó a la mitad de público que convocó la primera edición en su totalidad (4.000 personas). El domingo 22 habrá sets djs’s en vivo como John Digweed , referente del progressive house, y el español Nico Cano, dos referentes de primer nivel del género. También serán parte Fabian Argomedo, Luca Lacroix, Christian Álvarez y VJ JT.
El 28 de enero, por su parte, será el momento de No Te Va Gustar y de Nonpalidece. En febrero el festival tendrá continuidad el viernes 3, con el tech-house del DJ internacional español Héctor Couto y del especial de la Ciclic WILD Fest. El domingo 5 de febrero se podrá disfrutar del trap de nada menos que Trueno. El uno del género va a compartir el escenario con La Valenti, proyecto musical de la artista Valentina Soria, en el que confluyen estilos como el soul, R&B, hip hop, pop y el folclore. Además, la promesa del trap barilochense, Tobi, también tendrá su momento de brillar.